Ocho personas fueron detenidas este jueves en diez allanamientos que llevó a cabo la División Antidrogas de la Policía Federal de Rosario contra un clan sospechado de venta de cocaína al menudeo en la zona de La Lata. El principal investigado es Carlos Ortolan (59 años), cuya hija –que era enfermera del hospital Centenario– fue noticia en agosto de 2022, cuando la mataron a tiros en Gaboto al 5300.
En uno de los operativos los agentes federales incautaron un ladrillo de cocaína que tenía el sello de un delfín, que ya fue visto en varias causas recientes, por ejemplo, en los allanamientos contra la organización liderada por el preso René Ungaro.
Las irrupciones se hicieron en España al 3000, Corrientes al 3000, Amenábar al 1400, Sarmiento al 1200, Fray Luis Beltrán al 100, Pasaje 1.858 al 4400, Moreno al 6300. Se incautaron un kilo y medio de cocaína, 86 cartuchos calibre 22, un Kangoo, una moto, celulares, aros, anillos, dijes, pulseras y cadenas.
Los procedimientos fueron autorizados por el juez de Garantías Carlos Vera Barros a partir del pedido del fiscal Matías Scilabra del Área de Investigación y Litigio de Casos Complejos de la Unidad Fiscal de Rosario, y del fiscal coadyuvante Santiago Alberdi.
En la causa, que se inició antes de la puesta en vigencia del nuevo sistema de procedimiento penal, los investigadores detectaron que un grupo familiar vendía cocaína en La Lata y alternaba proveedores de manera periódica.
De acuerdo a las tareas llevadas adelante por los agentes, uno de esos proveedores de cocaína del clan solía moverse bastante. Dormía en hoteles, pensiones o en departamentos de alquiler temporario para dificultar la posibilidad de ser ubicado. Esos inmuebles también eran usados como punto de acopio y fraccionamiento de la droga.
La cabeza del clan que operaba la venta de droga minorista, según el legajo federal, es el papá de Joana Belén Ortolan, que fue acribillada a tiros a mediados de agosto de 2022 mientras se dirigía a trabajar al Centenario.
La enfermera en ningún momento tuvo relación con los delitos que investigan los fiscales federales, por lo que estaba por fuera del esquema familiar, aseguraron fuentes judiciales. No así otros familiares, que también fueron arrestados y allanados.