Este lunes la noticia de dos bebés muertos enterrados en el patio de una casa de Cañada de Gómez estremeció a la región. Y ahora se conocen detalles que complejizan el caso y su tratamiento judicial. La fiscal Gabriela Lescano, que lleva adelante la causa, señaló que por estas horas se intenta dilucidar si los bebés encontrados sin vida fueron asesinados o abortados antes de respirar. De ese “detalle” depende la caratula del caso y la posible pena imputable a la madre, e incluso al vecino en cuyo domicilio se encontraron los cuerpos, hasta ahora, los únicos dos detenidos.
En contacto con el programa Radiópolis (Radio 2), la fiscal explicó que se encuentra a la espera de los informes médicos para determinar si las gemelas muertas era recién nacidas o fetos. Por su grado de desarrollo, estaban en las últimas semanas de gestación, con lo cual pudieron haber nacido o haber sido abortadas en el vientre de la madre.
La médica legal que actuó en el caso confirmó que la mujer detenida y sospechada de ser la madre de las gemelas había, en efecto, cursado un embarazo recientemente. La misma médica también señaló modalidades de abortos domiciliarios posibles que podrían ajustarse a este episodio.
“Es una cuestión de si respiraron o no para saber si es homicidio –resumió Lescano–. En esta investigación lo importante es si los neonatos respiraron y si no, son fetos”.
“Lo importante es como choca la ley (de Interrupción Legal del Embarazo) que acompaña a las mujeres, con el delito de homicidio. Para el Código (penal) es homicidio desde que tiene vida, que puede respirar. Acá esta lo central”, abundó.
El hallazgo de los cuerpos (neonatos o fetos) se produjo tras una denuncia y un allanamiento pasada la medianoche del domingo en el patio de una vivienda de calle Bolívar al 900. Se trata del domicilio del vecino de la mujer que habría abortado.
La fiscal agregó que se investiga también ese vínculo para determinar porqué los cuerpos terminaron allí.