El sospechoso de 21 años que fue detenido el pasado martes por el ataque a tiros contra la farmacia y domicilio particular del jefe comunal de Alvear Carlos Fabián Pighin, fue imputado este jueves. El fiscal Franco Carbone acusó a Nicolás Martín Lemo (21 años) de haber sido quien trasladó al gatillero –que se presume que tiene 17 años– en una Honda Wave desde Villa Gobernador Gálvez para perpetrar el atentado. Quedó en prisión preventiva efectiva por el plazo de ley, según la resolución de la jueza Valeria Pedrana.

Carbone, jefe de la unidad fiscal de Balaceras del Ministerio Público de la Acusación, relató que el martes a las 0.46, Lemo y el sicario fueron en moto desde Villa Gobernador Gálvez hasta Alvear para hacer “tareas de inteligencia”. Volvieron a ir a la 1.56 directamente para cometer la balacera. En los trayectos realizados fueron captados por las cámaras de videovigilancia de la comuna, donde se ve de forma nítida el rostro del imputado al mando de una Honda Wave que sería la misma que se secuestró en su domicilio el martes, pero en horas de la tarde.

El rostro de Lemo se ve de forma nítida en las cámaras de videovigilancia de Alvear.

Los tiros fueron seis e impactaron en una persiana, en una ventana y en el mostrador de la farmacia, y en la puerta del domicilio particular, en una pared exterior y en el interior del living.

La moto secuestrada en la casa de Lemo (izquierda) tiene la misma patente que la filmada en el ataque (derecha)

Lemo fue detenido en La Plata al 2200 de Villa Gobernador Gálvez, en allanamientos llevados a cabo por la brigada operativa de la Policía de Investigaciones, el Comando Radioeléctrico de Villa Gobernador Gálvez y personal de la subcomisaría 8ª de Alvear. En su propiedad, se incautó una moto similar a la que quedó captada por las cámaras de Alvear, incluso tiene la misma patente.

Una pista a seguir por parte de la investigación es el motivo y quién instigó el atentado. Un dato que no se puede soslayar es el que expuso –entre otros fiscales– Carbone en octubre pasado, cuando se imputó a la presunta asociación ilícita liderada por Cristian Nicolás “Pupito” Avalle, un preso de Ezeiza que está sindicado de ser una segunda línea de Los Monos que opera principalmente en Villa Gobernador Gálvez, quien pretendía “plantar bandera” en Alvear para “quedarse con los negocios de las cooperativas”, de acuerdo a las escuchas telefónicas ventiladas en las audiencias.