La causa penal por omisión de denuncia que se le sigue al ex jefe de la Policía del Departamento Rosario Natalio Marciani fue archivada “por no existir elementos de convicción suficiente que habiliten a formalizar un requerimiento acusatorio en su contra, ni surgir como razonablemente previsible la incorporación de nueva evidencia”, indicó el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
La causa se había iniciado a raíz de una denuncia formal de la entonces jefa de la Policía de Santa Fe, Emilse Chimenti, quien tenía una mala relación laboral con Marciani.
Chimenti lo denunció luego de un intercambio informal por WhatsApp en el que el Marciani le hizo saber un rumor sobre un uniformado de confianza de Chimenti –Cristian Güemes– que estaría pidiendo “pidiendo una moneda” a proveedores de la Unidad Regional II a nombre de la propia Chimenti.
La entonces jefa de Policía exigió a Marciani que denuncie la situación, pero el policía se negó y terminó denunciado por la propia jefa, en un escandoloso episodio que terminó con un allanamiento en la Jefatura y celulares de Marciani y otros cuatro policías secuestrados.
El 6 de mayo de 2022 Caterina le había atribuido a Marciani, que llegó a la audiencia en libertad, “haber incumplido los deberes a su cargo al haber omitido o retardado realizar denuncia en virtud del hecho con apariencia delictiva que llegó a su conocimiento”.
Esto “en relación a que el policía Cristian Güemes –entonces subdirector general de administración de la Policía de Santa Fe– estaría realizando maniobras indebidas tendientes a obtener beneficios económicos de los proveedores de la Unidad Regional II a nombre de la jefa de Policía directora general Emilse Marcela Chimenti”.
Dato que surgió –continúa la acusación– “en una conversación informal vía WhatsApp que aconteciera el 17 de abril de 2022 y en la cual ella, como respuesta a lo que Marciani le contó le dijo que procediera a hacer la denuncia, a lo que Marciani contestó que no lo haría. Al día siguiente de dicha conversación Chimenti radicó formal denuncia basada en dicha conversación”.
Chimenti había oficiado de interventora de la Unidad Regional II (URII) previo a la designación de Marciani por el entonces ministro Jorge Lagna en enero de 2022 en un acto al que Chimenti no asistió, en una ausencia que se tomó como un desaire.
El viernes 3 de febrero el fiscal José Luis Caterina (Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos) expuso en un documento de 18 páginas que, a 8 meses de haber acusado a Marciani por “incumplimiento de deberes de funcionario público por omisión de denuncia en carácter de autor”, dispone el archivo fiscal de la investigación porque “no se ven reunidos elementos para formular un requerimiento acusatorio”.
“Para que pueda reclamarse responsabilidad penal a una persona por el delito de omisión de denuncia es necesario comprobar que dicha persona contó con el deseo deliberado de no denunciar o de no perseguir el delito, pero también es indispensable que se pueda acreditar que contaba con conocimientos suficientes de tal injusto (el que se omitiría denunciar) que le hubieran permitido denunciar suficientemente. Y si bien no puede negarse absolutamente que Marciani haya podido tener estos conocimientos, lo cierto es que en la investigación no surge evidencia de que Marciani haya contado con esa información concreta que le permitiera formalizar una denuncia”, dictaminó Caterina.