Una alumna de una escuela de la zona sur de Rosario fue demorada unas horas luego de que su madre alertara a la Policía que la adolescente había dejado una amenaza anónima en la institución, en complicidad con un compañero.
La nota intimidante, que hacía gala de la jerga del mundillo narco, exigía el pago de 10 mil pesos o de lo contrario prometía “acribillar la escuela”. La ¿broma pesada? se dio en un contexto de zozobra pública y alta circulación de mensajes virales con información falsa pero verosímil por los altos índices de violencia de la ciudad.
Este mismo lunes, dos escuelas del centro habían decidido suspender las clases como consecuencia de una amenaza de balacera que llegó al teléfono personal de la directora de una de las instituciones.
Personal de la Policía de Acción Táctica (PAT) se presentó este lunes al mediodía en la escuela San Martín de Porres Nº 1220, ubicada en cortada León al 900, cerca de San Martín y colectora José María Rosa, en el extremo sur.
Al parecer, la institución había sido blanco de las ya notorias amenazas firmadas por la “mafia”.
Escrito en hoja cuadriculada, el mensaje pedía “plata o plomo”, la frase infame popularizada por las series sobre narcotraficantes colombianos, y aportaba un número de teléfono. El escrito estaba pegado a una puerta de salida de emergencia y pedía 10 mil pesos o si no prometían acribillar el edificio.
Poco después, antes de las 16 aparecieron los peritos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) para preservar y peritar el papel.
Ya por ese entonces, el rumor de que la escuela se encontraba bajo amenaza había llegado a los grupos de WhatsApps de padres.
Según relataron fuentes policiales a Rosario3, en medio de la labor policial, una madre se presentó en la escuela junto con su hija de 15 años, alumna de la escuela, y aseguró que la chica –junto con un compañero– habían sido los artífices de la amenaza con tinte narcocriminal.
La chica, por su edad, es no punible, pero fue alojada en calidad de demorada junto con su madre en la comisaría 15ª por razones de jurisdicción. El expediente por amenaza quedó en el juzgado de menores.