El crimen de Franco Demarchi, el joven de 28 años oriundo de Sancti Spiritu que fue asesinado durante una emboscada en la capital provincial a donde llegó con el objetivo de comprar una moto, tuvo avances importantes. Este miércoles, la fiscal Ana Laura Gioria imputó a un preso por haber sido la persona que habló por Whatsapp con la víctima.
De acuerdo a la reconstrucción que pudo hacer la investigadora del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Demarchi “tenía interés en comprar una motocicleta y se contactó con un presunto vendedor a través del Marketplace de la red social Facebook”. “Desde un perfil con un nombre de fantasía le ofrecieron una moto marca Honda modelo Tornado a 1.200.000 pesos y le dijeron que se comunicara mediante la aplicación de mensajería para concretar la compra”, resumió durante la audiencia.
Esa conversación por Whatsapp fue con W. A. C., de 23 años que está detenido en la subcomisaría 6ª. A esto llegó la fiscal luego de identificar que la línea con la que habló Demarchi estaba a nombre de la madre del recluso y él la utilizaba mientras está privado de la libertad.
“La víctima era oriunda de la localidad de Sancti Spiritu y viajó en una camioneta con un amigo hasta el lugar en el que acordó reunirse con el dueño de la moto que quería adquirir”, relató la funcionaria del MPA. “Para avisarle que habían llegado, Demarchi volvió a contactarse por Whatsapp con el investigado, quien a su vez se lo informó por el mismo medio a un hombre que minutos después apareció acompañado de otros dos”, especificó.
Gioria remarcó que “las tres personas que interceptaron a la víctima y a su amigo portaban un arma de fuego cada una y se colocaron a los costados de la camioneta”. Planteó que “con la intención de robarles, les exigieron que se bajaran”, y puntualizó que “Demarchi encendió el vehículo para huir y, al ver frustrado su objetivo delictivo, uno de los atacantes le disparó tres veces”. De acuerdo con lo detallado en la audiencia, “recibió el impacto de uno de los proyectiles en la cabeza y falleció en el acto”.
Por esta situación, la fiscal imputó a W. A. C. como partícipe necesario de homicidio agravado. Además, se le endilgó la participación necesaria en una tentativa de robo agravado (por el uso de un arma de fuego apta para el disparo y por haber sido en poblado y en banda).