Un operativo de la Policía Federal en territorio bonaerense arrojó el secuestro de poco más de 30 kilos de cocaína que iban a ser “bajados” a Rosario. En la mañana de este lunes, detectives antinarcóticos interceptaron el cargamento en una estación de servicios ubicada en la localidad de San Pedro, sobre la autopista, y detuvieron a dos personas involucradas en la operación de traslado.
De acuerdo con los datos a los que accedió Rosario3, personal de la PFA Antidrogas de Rosario detuvo a los traficantes en una estación YPF ubicada sobre la autopista Rosario-Buenos Aires. Uno de los vehículos hacía de punta en el transporte. El procedimiento no fue aleatorio, ya que los fiscales federales de Rosario venían investigando a la organización desde diciembre.
A principios de ese mes, la Policía de Santa Fe detuvo a dos personas en el barrio Bella Vista, en Alsina y Ocampo, que trasladaban en un taxi unos diez kilos de cocaína en ladrillos que tenían envoltorios con el logo de Ferrari. Ese secuestro generó otro expediente que hoy tuvo su desenlace con el operativo en San Pedro, señalaron fuentes judiciales.
“En principio, los detenidos no están vinculados con las grandes marcas del delito en la ciudad”, indicaron voceros del caso a Rosario3. Por lo pronto, las identidades de los involucrados no fueron reveladas. El expediente está a cargo de los fiscales coadyuvantes Santiago Alberdi y Matías Mené, del Área de Investigación y Litigio de Casos Complejos de la Unidad Fiscal de Rosario.
Una vez secuestrada la droga, el juez federal Marcelo Bailaque autorizó una serie de trece allanamientos en Rosario, General Lagos y la ciudad de Santa Fe. Uno tuvo lugar en una cueva financiera ubicada en la zona de Mitre y Catamarca, en el microcentro de Rosario, donde los narcos habían comprado dólares para realizar la transacción, indicaron voceros del caso. La tercera detenida de la jornada fue allanada en un edificio ubicado en Silva y Del Valle Iberlucea, en el barrio de Arroyito.
Los paquetes de la droga secuestrada tenían un envoltorio con el 777, ya visto en otros paquetes incautados alrededor del mundo, y también como “sello” de los ladrillos. Según un diccionario de jerga informal compilado por la Drug Enforcement Administration (DEA), el número es uno de los tantos términos usados para nombrar a la cocaína.
En julio de 2020, en los Cayos de la Florida, unas islas paradisíacas ubicadas al sur de Miami, Estados Unidos, aparecieron flotando unos 25 kilos de cocaína envueltos en paquetes con el 777, según un reporte del Miami Herald. El misterioso número también apareció en distintas incautaciones en países como Ecuador, El Salvador, Panamá e Inglaterra.