A ver, una cosa es la demagogia que conlleva la rutina del estrellato –que contempla posar para la foto y autógrafos– y otra muy distinta es el contacto con el publico. Viste cómo es.
Y Robbie Williams no le escapa a lo dicho antes. Tanto que se desinfectó las manos en público luego de tocar a sus fans.
En pleno show en el Central Hall de Westminster de Londres para recibir el Año Nuevo, el cantante británico puso cara de asco tras tomar las manos de sus fans.
De regreso en el escenario, higienizó sus manos con un gel sanitizante. Todo esto mientras lo filmaban las cámaras de la BBC.