Transgresor, provocador, desprejuiciado, siempre atento a correr los límites más allá de lo permitido. Favio Posca aprendió a convivir con las criaturas creadas por él mismo y que viven “una vida paralela a la mía”, como dice él. En este nuevo show habla de la transición planetaria, de la revelación de la inocencia y de la fuerza del amor que salva.
“Estoy muy feliz por varios motivos. Primero porque es un gran show, tiene mucha risa, mucha emoción, muy buenas canciones y muy buena puesta en escena", comenzó diciendo Posca, en diálogo exclusivo con Rosario3.
"Por otro lado también tiene que ver cómo me siento yo en este momento después de dos años de no poder hacer nada, digo teatro real en vivo, siento mi regreso ¡¡guauu!!...es como que valió la pena esperar. Siento que estoy arrancando de cero, en el buen sentido, es como una energía de principiante”, aseguró el actor.
La pandemia le sirvió para tomar aire, barajar y dar de nuevo. “Creo también que lo bueno en un punto era también que necesitaba parar. Yo si no hubiera sido por todo lo que pasó, el apocalipsis que vivimos, no hubiera parado. Son 30 años sin parar, siempre pensando en el próximo show, metido en una inercia y había perdido un poco en los últimos espectáculos esa cosquilla que siempre está bueno tener a la hora de hacer un show y ahora la recupere", describió.
"Por eso digo que ahora me siento como un principiante como en esas épocas del Parakultural. Es que sabes que tenes una muy buena carta, que vas a sorprender y vas con esa energía”, reflexionó Posca.
Después de 30 años en cartel, Posca sigue manteniendo un espíritu perfeccionista para seguir seduciendo a sus más fieles seguidores. ”Siempre es un desafío un nuevo espectáculo por eso pienso tanto en la puesta, está muy bien pensado cada personaje, cuál personaje entra y cuál no", dijo.
"En cada show, a esta altura, tengo que hacer un casting de mis propios personajes. Hice un casting, quedaron los que tenían que quedar y no me equivoque en nada. A nivel textos este Bullshit está realmente muy bien. Trato de que los personajes que quiere ver la gente, que gustan mucho, a la gente los siga sorprendiendo. Los personajes que van tengo que estar muy atento a que exploten a que brillen”, agregó.
“Mis personajes siguen viviendo, le siguen pasando cosas y viven en paralelo a lo que me pasa a mí. A esta altura son personas que viven en sí mismo. Hoy Angelito viene con una problemática que es totalmente diferente. Hace 6 meses que esta limpio, dejó de tomar pero hay que ver por qué dejo de tomar y lo que cuento es que paso que dejo de tomar. El Perro canta una milonga porque ahora se dedica a eso. Se ha trasformado en un payador de la nada”, destacó.
Posca asegura que el unipersonal es el formato teatral que mejor le sienta y que con los años llegó a lograr algo que para él era impensado. “La sensación de libertad y adrenalina que eso te genera es maravillosa. Mis primeros espectáculos eran como más Punk, mas descarnados y no entendía mucho el tema de la emoción", afirmó Posca.
Y remató: "Los años me llevaron a abrir ciertas puertas que me gustaron y a la gente también eso de buscar que la gente se emocione. Un amigo de toda la vida, que al mismo tiempo es mi asistente, me dijo con este show lograste que este espectáculo sea sensible sin dejar de lado la transgresión y es una muy buena definición de Bullshit. Transgresión y sensibilidad es muy difícil que vayan de la mano”, finalizó.