Este martes por la mañana, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados unidos dio a conocer las nominaciones a la 95ª entrega de los Premios Oscar y, entre las candidatas en el apartado Mejor película en lengua no inglesa incluyó a Argentina, 1985.
A poco de conocidas las nominaciones, Ricardo Darín le confesó a Reynaldo Sietecase (Radio con Vos) que no “había subido a la maquina de la ansiedad hasta ahora, que nos prendimos a la tele a ver qué pasaba. Es una alegría”.
El actor protagoniza junto a Peter Lanzani el filme que dirige Santiago Mitre; un largometraje que corta siete años de ausencia del cine argentino en la gala de los Premios Oscar con producciones nacionales.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que la historia que aborda Argentina, 1985 –la investigación previa y el juicio a las Juntas militares que llevaron adelante los fiscales Julio Strassera y Luis Moreno Ocampo– haya incidido en la selección, Darín la desestimó.
“No creo. Nosotros acompañamos a la película a muchos lugares a donde no conocían nada de la historia, no dominaban el tema. Creo que lo que se valora mucho es el guion, la dirección y las actuaciones. Después, por supuesto, sí tiene un gran valor la reivindicación de lo que significó ese extraordinario juicio, único en nuestro continente. Creo que eso también empuja, pero la película fue considerada en términos generales, como película”, sostuvo el actor en la entrevista radial.
Ante la pregunta por “las reacciones” que la cinta ha generado entre espectadores –muy emotivas algunas de ellas–, Darín expresó: “Es un es subibaja emocional”.
El artista las atribuyó al “guion muy sólido, inteligente, valiente al mismo tiempo” que “asume las posibles controversias que podría generar y las pone arriba de la mesa (…) Eso hace que, pienses lo que pienses, tengas la tendencia que tengas, no puedas dejar de considerar que es justo volver poner este tema arriba de la mesa”.
Ante el planteo de Sietecase sobre la importante de recuperar el juicio a las Juntas militares en momentos en que discursos negacionistas ponen en duda o relativizan la desaparición forzada de personas y la apropiación de bebés de durante la última dictadura cívico militar, Darín sostuvo: “Los chicos que nacieron en democracia no necesariamente son conscientes de lo que implica la construcción de la democracia porque lo toman como algo natural. Me parece que la película lo que sugiere es recordar y reivindicar la importancia de la lucha de mucha gente y de la cantidad de vidas que se perdieron en la búsqueda de una estabilidad democrática”.
Por último, consultado sobre la construcción del personaje, el actor detalló que con el director Santiago Mitre –a quien definió como “brillante”– se avanzó en “un método de trabajo que fue no dejarnos impresionar por a realidad, no tratar de copiar a (Julio) Strassera sino apoyarnos en aspectos de su personalidad que ya conocíamos, pero con un margen de libertad”.
En el cierre y ante la pregunta del cronista rosarino, Darín confió que entre las cintas que compiten con Argentina, 1985 por el Premios Oscar a la Mejor película en lengua no inglesa, Close (Bélgica) “es la que más me gusta” y que All Quiet (Alemania) “es la gran favorita”.