Más de 200 personas murieron este fin de semana por una avalancha registrada el viernes en el sur de Colombia. El hecho fue declarado como una de las peores tragedias de la historia del país.

La avalancha se produjo a causa de las intensas lluvias, cuando dormían la mayoría de los pobladores de Mocoa, capital del departamento de Putumayo, por la que pasan tres ríos que arrasaron con al menos 17 barrios, puentes vehiculares y edificaciones.

La última crifra actualiza de víctimas fatales indicaba 234. "Es una cifra realmente muy lamentable, quiero reiterar que nuestros corazones están con estas familias, acabo de hablar con muchas de ellas, vamos a hacer todo lo posible para ayudar", señaló el presidente Juan Manuel Santos.

Santos decretó calamidad pública luego de hacer un recorrido aéreo por la zona en la que sólo se ven lodo y escombros. Asimismo, el mandatario afirmó que "toda la capacidad del Estado está desplegada para apoyar la labor humanitaria y de búsqueda y rescate".

Explicó que la noche del viernes llovió 130 milímetros cuando usualmente, en todo un mes, llueven 400 milímetros, "es decir 30% de la lluvia de un mes se produjo anoche y eso provocó la creciente de tres ríos", puntualizó Santos.

Por su parte, el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Carlos Iván Márquez, indicó que la situación "es bastante crítica" por lo que se activó un plan de contingencia para hacer llegar "ayuda humanitaria".

"La primera respuesta es ayudar a los afectados y buscar a los desaparecidos", sostuvo Márquez.

Desde el UNGRD informaron que un grupo de la Unidad de Operaciones Especiales en Emergencias y Desastres de la Policía Nacional (Ponalsar) se dirigía a Mocoa con alimentos, equipos de aseo, colchonetas y carrotanques con agua para asistir a los damnificados.

El alcalde de Mocoa, José Castro, manifestó su "desconcierto" al ver cómo los barrios aledaños a los ríos "quedaron prácticamente desaparecidos, y admitió que "hay un número indeterminado de desparecidos, de niñas y personas que no alcanzaron a salir, que no han sido reportados".

Los habitantes de Mocoa expresaron vía telefónica que en la ciudad están sin energía eléctrica porque la avalancha se llevó todo a su paso.

"Todo el sector se encuentra sin energía desde las once de la noche", expresaron los pobladores tras manifestar que las lluvias fueron tan intensas que los ríos Mulato y Taruca que desembocan en el río Mocoa, se salieron de su cauce y agravaron la tragedia.

"Nosotros a las 11 de la noche nos damos cuenta que el río sonaba intensamente, muchos estruendos, entonces me levanto con mi esposa y mi papá y salimos en un vehículo de la familia", relató William Ramírez, quien sobrevivió.

Videos tomados con teléfonos celulares y difundidos por redes sociales mostraron decenas de pobladores buscando sobrevivientes en medio de casas destruidas, gigantescas rocas, lodo y escombros arrastrados por los ríos desbordados.

Bomberos, fuerzas policiales, militares y autoridades se encuentran trabajando en el lugar, aseguró Francisco Javier Cruz, comandante de la Sexta División del Ejército colombiano, que tiene el Putumayo dentro de su jurisdicción.

Una sala de crisis fue instalada en la zona para organizar las acciones de rescate y centralizar la información, y en un comunicado emitido desde allí esta madrugada se confirmó que los niveles de los ríos han descendido.

Colombia tiene dos temporadas de lluvias muy marcadas, de marzo a junio y de octubre a diciembre, que habitualmente dejan víctimas mortales y damnificados por avalanchas e inundaciones.

En mayo del 2015 una crecida súbita de un río en el municipio de Salgar, en el departamento de Antioquia, arrasó todo lo que encontró a su paso y dejó 97 personas muertas y decenas de damnificados.

Fuente: Télam