“Barrio tranquilo de mi ayer, como un triste atardecer, a tu esquina vuelvo viejo...”, escribió Cadícamo, cantó Sosa. Hoy para muchos la vida es un tango y deben regresar a la casa de sus padres porque no pueden ya pagar un alquiler. Otros, estaban a punto de dar ese salto d independencia y encuentran que es impagable ocupar una vivienda. Los alquileres siguen en alza en Rosario y esta suba se evidencia también en el sector comercial, a través del cierre de locales.
Desde la Concejalía Popular, Ariel D´Orazio brindó un panorama general en relación a los alquileres en la ciudad. En diálogo con Radiópolis (Radio 2), advirtió que subieron entre un 35 y un 50 por ciento de un contrato a otro. “La suba complica mucho la estabilidad de quienes alquilan y aumenta el índice de morosidad”, señaló.
“A la hora de renovar el contrato hay que tener al menos unos 45 mil pesos, y lo mismo en caso de querer entrar a un inmueble”, indicó y consideró que esta suma elevada obliga a muchos inquilinos a regresar a la casa de sus padres o familiares al tiempo que frena a quienes intentan independizarse o irse a vivir en pareja. Los estudiantes que llegan de pueblos o ciudades aledañas también se ven afectados por la suba del costo de los inmuebles en locación. D´Orazio señaló que muchos retornan o bien, alquilan entre muchos un departamento lo que favorece al hacinamiento.
En tanto, el valor en alza también impacta en el comercio. Según trascendió, el alquiler de un local en calle San Luis, por ejemplo, puede llegar a costar 100 mil pesos mensuales. “Las persianas se siguen bajando mes tras mes. En 2018 registramos más bajas comerciales que altas y es una tendencia que se repite desde hace unos tres años”, subrayó.