En la localidad de Álvarez, muy cercana a Rosario, se dio una situación de inseguridad muy llamativa. Un ladrón entró encapuchado a robar en un almacén y amenazó al dueño con una escopeta, pero no contó con la fuerza y la decisión del comerciante, que se aferró al caño del arma y forcejeó hasta quedarse con ella. El delincuente huyó. Todo quedó grabado en la cámara de seguridad instalada en el local.
Tato, almacenero de Álvarez, contó lo sucedido al periodista Pedro Levy, en vivo en De 12 a 14 (El Tres). “Es un mal momento que me tocó pasar y la verdad que es bravo, no se lo deseo a nadie”, confió.
El comerciante contó que el ladrón “entró a las 9 de la noche, en un horario comercial, cuando todavía entra gente al negocio”.
“Me sorprendió, entró encapuchado y con la escopeta. Atiné a agarrarle el arma y a defenderme, porque ya me robaron tres veces y yo hago mucho sacrificio para mantener el negocio, paso muchas horas acá adentro”, describió luego.
Tato continuó: “Agarré el arma y empecé a forcejear; fue un acto que me salió de la bronca que tenía. En ese momento no pensé lo que podría haber pasado. Después, cuando se fue, recapacité que fue un peligro”.
El almacenero comentó: “Me hizo bastante destrozo pero no llegó a robarme”. Y agregó con alivio que “por suerte el arma no estaba cargada”.
“Sospecho que era alguien del pueblo, porque no hablaba y estaba encapuchado, pienso que por miedo a que yo lo reconociera”, especuló el hombre. “Acá no hay mucho robos, pero no te podés confiar porque de vez en cuando suceden”, añadió.
Por último, destacó: “La cámara la puse hace dos años, pero ahora estoy pensando en agregar una cerradura eléctrica y rejas. Tengo que trabajar con más cuidado”.