Un bolsa con polvo de la luna, que es la única que se encuentra legalmente en manos privadas, se subastó en los Estados Unidos y un comprador anónimo pagó por la adquisición 1.8 millones de dólares.
La casa Sotheby's de Nueva York subastó una colección de objetos de programas espaciales estadounidenses y soviéticos con motivo del día del amigo. Entre la amplia variedad de elementos se encontraba una bolsa con resto de polvo lunar que fue utilizada por el astronauta Neil Armstrong durante la misión Apolo 11 y que fue la que mayor interés despertó.
La bolsa data de 1969 y lleva una etiqueta con la frase "Retorno de muestra lunar" y su contenido fue certificado por los científicos de la Nasa quienes confirmaron que se utilizó para transportar más de 500 gramos de material procedente de la superficie lunar.
El preciado material había sido valorado por la Casa Sotheby's por alrededor de dos millones, aunque su precio final fue 1.8 millones y es la única muestra de polvo lunar que se encuentra legalmente en manos privadas. El resto se conserva en el museo nacional Smithsonian de Washington.
Por un error burocrático, la bolsa fue ofrecida en una subasta en 2015 y terminó en manos de una abogada de Chicago, Nancy Lee Carlson, por la módica suma por 995 dólares.
La letrada envió el material a la Nasa para que lo investigue y cuando se corroboró su procedencia se lo confiscó el gobierno debido a que la posesión privada de objetos lunares está prohibida.
Entonces Carlson presentó una demanda y el juez consideró que al haberla adquirido legalmente, tenía derecho a conservarla. Esa misma bolsa es la que fue subastada y adquirida por un comprador que prefirió mantenerse en el anonimato.