La denuncia de Héctor Cavallero sobre supuestas irregularidades en el manejo de fondos en el programa Rosario Habitat obtuvo primero respuestas aisladas de diferentes representantes del municipio y de algunos de los afectados (con nombre y apellido) en la acusación. Sin embargo, este jueves a la tarde fue un verdadero pelotón de funcionarios –armados con carpetas con datos y gráficos que desmentían las acusaciones– quienes salieron a matar al Tigre. “Tenemos la conciencia tranquila”, aseguró el secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza, quien encabezó la conferencia de prensa en la que además participaron el titular de Hacienda Juan Carlos Fernández y el director del Servicio Público de la Vivienda Gerardo Barro.

Zabalza aseguró que la movida de Cavallero fue claramente “una operación política” y que espera que el tema termine en la Justicia para evitar más “manoseo” de gente inocente. La defensa de la Municipalidad quiso ser contundente: no se limitaron al discurso, sino que además entregaron a los periodistas carpetas que contenían documentación sobre los supuestos errores de la denuncia del Tigre.