La investigación fue realizada por el Departamento de Pediatría del Vanderbilt University Medical Center de Nashville, estado de Tennessee, Estados Unidos.
El artículo de la revista Nature, comunicado a través de Télam, remarcó que si bien existen diferencias en la gestación de ratones y humanos, los hallazgos "podrían llevar a los expertos a dar con una vacuna contra el zika".
Asimismo, lo autores recordaron que el virus puede causar serios daños neurológicos al feto, como la microcefalia, o provocar enfermedades en adultos, como el síndrome Guillain-Barre, un trastorno neurológico que conduce a que el sistema inmunitario ataque a una parte del sistema nervioso.
Para su estudio, los científicos aislaron anticuerpos humanos de los glóbulos blancos de individuos previamente infectados con el virus del zika y se centraron en un tipo en particular que destacó por su "potencia" en test preliminares.
Luego analizaron el comportamiento de ese anticuerpo en un modelo de ratones infectados con zika y en otro experimento aplicaron el mismo tratamiento en hembras de ratón embarazadas antes y después de contraer la infección, precisó un despacho de la agencia EFE.
En ambos casos, la carga viral tanto en la madre como del feto se vio reducida considerablemente, mientras que se limitaron los daños causados por el virus en la placenta y aumentó el tamaño del feto.
Los resultados sugieren que el tratamiento podría ser útil como instrumento preventivo y también como terapia en individuos ya afectados por el virus del zika.
"Las pruebas, que demuestran que esta terapia antiviral puede prevenir o controlar la infección de virus del zika durante el embarazo en ratones, plantean la posibilidad de que se efectúen intervenciones significativas durante el período de gestación", destacaron los investigadores.