En esta oportunidad, el portal Universia propone 6 consejos para los “aprendices visuales”, es decir, aquellos estudiantes que se valen principalmente de la lectura, las representaciones gráficas e imágenes para aprender.
Si bien la anatomía de nuestros cerebros es similar, la evidencia científica ha demostrado que no existen dos mentes que funcionen exactamente igual, y por ende, tampoco una técnica de estudio compatible con todas las personas. Lo cierto es que los seres humanos percibimos y asimilamos la información a través de distintos canales, dando lugar a los distintos tipos de aprendizaje, por ejemplo, el auditivo, el kinestésico, el repetitivo o memorístico y elvisual, al cual nos dedicaremos en esta oportunidad.
En primer lugar, y para que puedas determinar si sos un estudiante visual o no, a continuación enumeraremos algunos de sus hábitos más representativos: recuerdan con más facilidad lo que vieron en lugar de lo que escucharon, tienen preferencia por la lectura y la escritura, tienen problemas para recordar reglas gramaticales y ortográficas, necesitan conocer el propósito de un proyecto y crear una visión general del mismo antes de comenzarlo, suelen cerrar sus ojos para visualizar o recordar algo, los sonidos los distraen fácilmente.
¿Estos hábitos conciden con tus costumbres?
De ser así, a continuación te proponemos una serie de recomendaciones para tener en cuenta a la hora de estudiar:
1. Utilizá resaltadores e implementá un código de colores para categorizar y/o organizar tu material.
2. Comenzá a utilizar material audiovisual, por ejemplo, videos didácticos y tutoriales. Incluso podés mirar una película o serie que ilustre la temática que tenés que estudiar.
3. Hacé tarjetas de memoria oflashcards para aprender el vocabulario, las fórmulas y los conceptos más importantes. De esta forma, tendrás toda la información que necesitas en un mismo sitio y de forma resumida.
4. Creá mapas conceptuales e infografías para organizar tus notas y la bibliografía obligatoria.
5. Minimiza las distracciones. Por ejemplo, tratá de sentarte al frente del aula y elegí un sitio silencioso y tranquilo para estudiar. En el caso que no dispongas un espacio con estas características, dirigite a una biblioteca pública o utilizá música clásica para neutralizar el sonido ambiente.
6. Tratá de tomar notas a mano. Si bien puede resultar anticuado y suele tomar más tiempo, la evidencia científica indica que quienes implementan la escritura manual recuerdan los datos con más facilidad en comparación a quienes toman sus notas en una computadora o tablet.