El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se comunicó el último sábado con la premier británica, Theresa May, como forma de respaldar el ataque liderado el último viernes por Estados Unidos contra el gobierno sirio.
Por su parte, el presidente sirio, Bachar al Asad, denunció este domingo "la campaña de falacias y mentiras" contra su país por parte de EE.UU., Francia y el Reino Unido ante el Consejo de Seguridad de la ONU, durante una reunión en Damasco con diputados rusos.
"La agresión tripartita con cohetes contra Siria estuvo acompañada de una campaña de falacias y mentiras en el Consejo de Seguridad por parte de los mismos países agresores contra Siria y Rusia", lamentó Al Asad, según un comunicado de su oficina publicado en su cuenta de Telegram.
El mandatario sirio consideró que esto prueba que Rusia y Siria "no solo libran una batalla contra el terrorismo sino también para proteger la ley internacional basada en el respeto a la soberanía de los Estados soberanos y la voluntad de sus pueblos".
La nota precisó que Al Asad hizo estas declaraciones durante un encuentro con una delegación del partido Rusia Unida, la formación que sostiene al presidente ruso, Vladímir Putin.
La agencia de noticias oficial siria, SANA, agregó que los parlamentarios rusos afirmaron que "la agresión tripartita contra Siria es una violación clara de las convenciones internacionales y se produce en un momento en que los sirios tratan de restaurar la estabilidad y continuar el proceso de reconstrucción de lo destruido por el terrorismo".
Por su parte, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu manifestó su respaldo al ataque perpetrado en Siria y advirtió sobre el riesgo de la presencia militar iraní en Siria.
"Le dije que el ataque muestra un mensaje internacional importante de tolerancia cero sobre el uso de armas no convencionales" afirmó este domingo Netanyahu durante el inicio de la reunión semanal con su Consejo de Ministros en referencia a la comunicación telefónica que mantuvo con Theresa May.
El mandatario aseguró que transmitió a su par británica que esa política "debería también reflejarse en la prevención de las capacidades nucleares de los estados y organizaciones terroristas".
En este punto, Netanyahu insistió en alertar que "al Assad debe entender que cuando permite la consolidación militar de Irán y sus aliados en Siria, está poniendo en peligro la estabilidad de toda la región".
Netanyahu, uno de los principales detractores del pacto nuclear iraní, recientemente le insistió al presidente ruso, Vladímir Putin, aliado de al Assad, que su país "no permitirá la acumulación militar iraní en Siria".
En ese sentido el ministro de Educación, Neftali Bennett, afirmó que Israel no permitirá que Irán se establezca en Siria. "Israel tiene total libertad de acción en sus fronteras", advirtió.
EEUU, Francia y el Reino Unido efectuaron el último viernes una ofensiva con misiles contra instalaciones gubernamentales sirias, donde, según Washington, se producían y almacenaban armas químicas.
Este ataque fue llevado a cabo como represalia por el supuesto ataque químico del pasado 7 de abril en la ciudad de Duma, en las afueras de Damasco, durante una ofensiva gubernamental contra la facción rebelde que controlaba esta urbe, el Ejército del Islam.
Tanto Damasco como Moscú han negado el uso de armamento químico en Duma