La concejala radical María Eugenia Schmuck denunció este lunes nuevas maniobras intimidatorias de taxistas y los responsabilizó públicamente “por cualquier hecho de violencia” que pueda registrarse contra ella o su familia. Este martes presentará una acusación formal.

“Quiero decirle a los “taxistas” que me hacen llegar mensaje intimidatorios a mí y a mi familia respecto de dónde vivo o qué hago: los responsabilizaré por cualquier hecho de violencia que me ocurra a mí o a mis seres queridos, y voy a ir a fondo hasta que se condene a los responsables”, avisó la edila en Twitter.


Luego, en diálogo con Rosario3.com, Schmuck, dijo que hasta ahora tomaba con naturalidad algunas situaciones –como insultos de tacheros en la calle– pero que la alertaron comentarios de allegados sobre supuestas averiguaciones que algunos choferes estaban haciendo acerca de su vida personal.

“Me llegaron mensajes de distintos círculos sobre que planeaban a ir a mi casa, que se iban a meter con mi familia. Que estaban preguntando mi dirección y a qué escuela iban mis hijos”, señaló.

Y relató otro doble episodio: “Al principio no lo asocié con esto, pero dos días seguidos en mi casa alguien se prendió al timbre a las 4.30 de la mañana, las dos veces a la misma hora”.

“No sé quiénes son pero es un grupito”, dijo Schmuck y adelantó que que este martes acudirá al Ministerio Público de la Acusación para dejar sentada una denuncia sobre estos nuevos amedrentamientos.

Dijo que dicha presentación será “simplemente a los hechos de que quede constancia que un grupo de desconocidos está con esta estrategia de intimidación” y a ellos les avisó: “Lejos de intimidarme, tengo la guardia más alta que nunca con las denuncias de la Terminal”.

Taxistas marcharon el mes pasado contra la iniciativa de Schmuck. (Alan Monzón/Rosario3.com)

La concejala encabezó, junto a su par Fernanda Gigliani, un pedido de investigación por asociación ilícita a la llamada cooperativa Mariano Moreno, que trabaja en las paradas de la Terminal de Ómnibus, según las edilas con un modus operando ilegal y mafioso.

Además, Schmuck presentó el mes pasado un proyecto para regular todas las plataformas digitales relacionadas con coches de alquiler, ya sean del sistema público como del privado, entre ellos Uber. Algo que los taxistas tomaron como una provocación y salieron a decir que una eventual implementación significaría más precarización laboral.