Un hombre fue detenido por haber matado a balazos a su compañero de la infancia con el que fue a pescar el pasado fin de semana. Después del crimen, prendió fuego el cadáver, lo descuartizó con un machete y después enterró los restos en una isla de la localidad bonarense de San Nicolás.
Según informó el sitio web TN, Luis Ávalos se dirigió a una comisaría a declarar que mató accidentalemente a su amigo Maximiliano Carrasco de un escopetazo que se le escapó cuando limpiaba el arma. Sin embargo, la versión que apuntaba a ser un homicidio culposo fue desmentida por la fiscal que intervino en la investigación.
La fiscal Verónica Marcantonio contó que cuando llegaron con la policía científica hasta el rancho de chapa acanalada descripto por el imputado, encontraron afuera un brasero con cenizas y otra fogata que hacía poco tiempo se había quemado. Cavaron en inmediaciones del lugar y hallaron el brazo izquierdo de la víctima.
Además, se encontraron un hacha, dos palas, un cubrecamas, un machete y ropa. Todos los elementos presentaban manchas de sangre. Los perros rastreadores terminaron de encontrar las otras partes del cadáver de Carrasco.
De acuerdo al relato de la mujer de la víctima, su esposo se había peleado hacía un año con el presunto asesino. En aquella ocasión recordó que también quiso atacarlo con un machete. Estuvieron distanciados por un tiempo y habían retomado la relación hace pocos meses.