Las parejas que recurren a la fertilización asistida han atravesado un largo camino buscando el embarazo, y suelen llegar con muchos temores y dudas a esta instancia. Rosario 3 consultó al médico obstetra Cristian Busnelli sobre esas sensaciones y los cuidados que deben adoptar.
- ¿Qué manifiestan en las consultas las parejas que han obtenido el embarazo por tratamiento de fertilización?
- Son parejas que llegan con muchas inquietudes. Ya de por sí, paternidad y maternidad implican un deseo de saber cómo va a ser, qué van a sentir. Hoy paternidad y maternidad se viven uno al lado del otro. En estos casos, además, hay muchos temores ya que son parejas que vienen con un tiempo transitado en buscar del embarazo y llegan sobre todo ávidos de información, de saber qué hacer, qué controles realizar y, básicamente, cómo cuidarse para que, esto que les ha costado tanto, llegue a buen término.
- ¿Con qué frecuencia se controlan las parejas?
- Generalmente una vez por mes. Pero no olvidemos que estos embarazos, de acuerdo a la causa que los ha generado, son considerados embarazos de mayor riesgo, por lo cual los controles, en ciertas etapas, tienen que realizarse con mayor frecuencia.
- ¿El comportamiento de la mujer en el parto se ve afectado por haber obtenido el embarazo por tratamientos de fertilidad?
- Hoy, ya es una generalidad, la mujer llega al consultorio en la primera consulta y plantea cómo quieren parir. Se sabe que lo mejor, siempre, es un parto normal, para que las condiciones de nacimiento del bebé sean las naturalmente adecuadas. De todas maneras, hay mujeres que albergan ciertos temores y por esa razón piden que se les haga una cesárea. Yo no comparto ese criterio y trato de convencerlas para que afronten naturalmente el parto.
- Durante este período la mujer va experimentando cambios en su cuerpo…
- La mujer se transforma íntegramente. Transforma todo su ser. Experimenta cambios desde el aumento de niveles hormonales diariamente. Incluso se ve afectada su sensibilidad, ya que bien sabemos que las hormonas que intervienen en el embarazo atraviesan las barreras del sistema nervioso central y actúan modificando la sensibilidad de la mujer, que se torna hipersensible.
- ¿Cómo lo manifiestan?
- Se vuelven melancólicas, se enojan fácilmente, hasta que de a poco se va estabilizando.