El año 2018 arrancó con “malas noticias” para algunos sectores económicos, según considera en su último informe la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), que informó que “al menos seis provincias decidieron subir las alícuotas de Ingresos Brutos para comercios y servicios”. Así, el organismo analizó que “poco duró la ilusión de una reducción en la presión fiscal sobre las pymes de esos sectores, que se vaticinó con el pacto fiscal firmado entre Nación y provincias sobre fin de 2017”.
“Por lo menos seis provincias ya aprobaron aumentos en las alícuotas de Ingresos Brutos al comercio y los servicios para este año, y eso pone en riesgo a centenares de pymes de esos sectores”, informó Fabián Tarrío, presidente de Came, quien a fin de 2017 alertó sobre esa posibilidad que se abría con algunos detalles del nuevo Pacto Fiscal.
Salta, Río Negro, Neuquén, Tucumán, Tierra del Fuego y Misiones, son las que decidieron subas sobre el comercio y los servicios. A eso se suman los revalúos inmobiliarios por encima de las tasas de inflación en varias jurisdicciones y lo mismo con las tasas de servicios urbanos municipales.
Los casos detectados en Ingresos Brutos fueron:
Salta: elevó Ingresos Brutos al comercio desde la actual alícuota de 3,6% a 5% este año. En esa provincia, el 83% de los recursos propios provienen de ese tributo.
Misiones: subió del 3,5% a 4,5% en el comercio mayorista, de 2,5% a 5% en servicios comerciales e industriales, de 3,5% a 5% en servicios profesionales, científicos y técnicos, de 0% a 2% en elaboración de pan común y galleta, de 0% a 4,5% la venta minorista de pan común y galleta, de 3,5% a 5% en hotelería y alojamiento, en servicios de internet, radio y TV, portales web, enseñanza, salud, servicios sociales, artísticos, culturales, deportivos y de esparcimiento. Se duplicó, además, el Impuesto a los Sellos para la transferencia de automotores y motocicletas (del 1,5% al 3%).
Tucumán: ascendió de 3,5% a 5% las alícuotas de IIBB a comercios y servicios para pymes que facturen más de $ 1 millón anual. También derogó el régimen especial de franquicias tributarias que establecía diferencias a favor de los contribuyentes con establecimiento productivo en la provincia. En la industria la alícuota subió de 1,8% a 2%.
Río Negro: elevó a 5% la tasa general de Ingresos Brutos al comercio y a los servicios generales cuando hasta 2017 era entre 3% y 3,8%. Además, hizo un fuerte revalúo inmobiliario que derivó en incrementos de hasta 46% en ese tributo.
Neuquén: subió de entre 3% y 3,5% a 5% la tasa general de Ingresos Brutos al comercio (mayorista y minorista). Para los servicios generales la tasa creció de 3% a 4%.
Tierra del Fuego: la alícuota de IIBB incrementó a 3,5% para comercios, servicios, hoteles, turismo y restaurantes, desde el 3% que regía hasta 2017. Además, subió de 1% a 1,5% la alícuota del Fondo Compensador.
CABA: los comercios que facturen más de 10 millones de pesos anuales tendrán un incremento en forma escalonada en Ingresos Brutos, que subirá del 3% al 5%.
Ingresos Brutos es un impuesto “distorsivo y regresivo”, por eso el Gobierno había convenido “trabajar en su reducción”, recordaron desde la entidad. Pero en el capítulo III del nuevo Consenso Fiscal firmado a mediados de noviembre pasado, se establecieron topes máximos de alícuotas para 2018 que en el sector comercio y servicios estaban muy por encima de las vigentes. Frente a la falta de recursos, las provincias decidieron incrementar este tributo.
Lo mismo sucedió con el sector de la construcción, como es el caso de La Pampa, que lo llevó de 2,5% al máximo permitido para este año (3%).
También el Impuesto Inmobiliario quedó en la mira. El pacto fiscal prevé un aumento desproporcionado en ese tributo, con el compromiso del Gobierno nacional de ayudar a actualizar la valuación fiscal para aplicar desde allí las tasas, que llegan al 2%. De hecho, en la Provincia de Buenos Aires, por ejemplo, se hizo un revalúo a partir de la cuota que vence en febrero, que arranca en 40% y sube escalonadamente hasta 75% para las de mayor valor.
A su vez, varios municipios avanzaron con subas por encima de la inflación –en algunos casos muy fuertes– en sus tasas de servicios urbanos. Si bien la mayoría de las ciudades del país realizaron aumentos del 30% en sus tasas, casi 10 puntos mayor a la inflación esperada para el año, hay casos notorios. Por ejemplo, en la ciudad de Mar del Plata, los aumentos llegan hasta 600%. En Olavarría, dependiendo la zona, hasta 100%. En Pringles, entre el 60% y 100%. En La Plata, hasta 50%. En Hurlingham, entre 35% y 60%. En Morón al 50%. En Tornquist al 30% cuando ya en 2017 se habían aumentado un 100%. En Pilar las boletas sorpresivamente están llegando con incrementos de hasta 300%. En la ciudad de Paraná (Entre Ríos), se aprobaron subas de entre 60% y 80%. En Resistencia (Chaco) el promedio de las alzas es del 47%.
Came recordó que celebró la sanción de la Ley Pyme que “por primera vez otorgó un tratamiento diferencial a nuestro sector”. Pero luego afirmaron que “lamentablemente el pacto fiscal va en sentido contrario de dicha norma, perjudicándonos notoriamente al no discriminar entre Pymes y grandes empresas”.
“La situación fiscal apremiante a nivel provincial y municipal no debe hacer perder de vista que también muchos comercios y pymes del sector servicios están atravesando tiempos delicados, con baja rentabilidad. El avance del Estado con más impuestos tendrá impacto en la dinámica del sector”, concluyeron.