La Justicia ordenó que la imagen de una virgen con un pañuelo verde atado a la boca, como símbolo de la lucha por el aborto legal y seguro en Argentina, debe ser exhibida en una “habitación cerrada”. La medida cautelar surge de una presentación que realizó un grupo de abogados católicos el 12 de marzo pasado, a propósito de la imagen que se encuentra en el Centro Cultural “Haroldo Conti” de Buenos Aires.
La medida cautelar fue comunicada por el Juzgado Contencioso Administrativo Federal 10ª a la Corporación de Abogados Católicos, como respuesta a las demandas que pedían sanciones contra el centro cultural, los responsables y el retiro de la “imagen ofensiva”, vulgarmente llamada “virgen abortera”.
Mientras “se llevan a cabo las anunciadas medidas tendientes al retiro definitivo de la imagen de la virgen”, debe ser “exhibida en un salón a puertas cerradas, con el debido control de acceso sólo autorizado a mayores de edad y con la correspondiente inclusión de cartelería previa al ingreso, en la cual se alerte sobre los eventuales efectos que podría causar en los sentimientos religiosos de los espectadores”, comunicaron fuentes judiciales.
La imagen de la Inmaculada Concepción pintada con un pañuelo verde en su rostro se instaló en el centro cultural el pasado 7 de marzo, como parte de la muestra “Para todes, tode”, de Kekena Corvalán.