Los organizadores de la campaña sostienen que el objetivo es más mediático y político que ecológico, ya que la intención es alertar a los ciudadanos, a los medios y, sobre todo, a los partidos políticos (de cara a las elecciones francesas de abril) sobre el problema del derroche energético y la necesidad de actuar.
Los integrantes de la agrupación ecologista quieren que los candidatos presidenciales se den cuenta de que el cambio climático es un importante tema de debate. Por eso han elegido el día primero de febrero para el apagón, porque esa será la fecha en la que un grupo de expertos intergubernamentales presentará en París un nuevo informe de las Naciones Unidas sobre la evolución del clima.
La Alianza por el Planeta está formada por diferentes ONGs, asociaciones de defensa del medio ambiente, jurídicas, sociales, humanitarias, científicas, de consumidores, sindicatos y no acepta organismos estatales, empresas ni partidos políticos.