La estimulación eléctrica medular es un procedimiento analgésico para cuadros de dolor severo focal, preferentemente neuropático. Su utilidad, eficacia y eficiencia han alcanzado los niveles de evidencia más elevados que le es permitido a una técnica quirúrgica.
Rosario3.com consultó al doctor Julián Pastore, neurocirujano, quien explicó que la misma consiste en una pequeña cirugía para implantar un electrodo, que cuenta con polos para favorecer la modulación de esa “electricidad” por medio de un aparato estimulador externo. Ese electrodo se apoya sobre la parte posterior de la médula. “Luego de implantado vemos cómo se estimulan las partes que nos interesan en el paciente”, señaló.
“En una segunda intervención implantamos un aparato pequeño como si fuera un marcapasos que se coloca debajo de la piel y se maneja externamente para modular y que cumplirá la función del estimulador externo”, explicó y agregó que en pocos días el paciente nota un claro alivio del dolor, que en estos casos va más allá del umbral de los dolores habituales.
¿En qué tipo de dolores está indicada esta intervención?
En los dolores neuropáticos, dolor del nervio, dolores quemantes, con sensación de ardor muchas veces en las dos piernas; hemos comprobado que esta técnica tiene muy buenos resultados.
¿A quiénes se les indica?
Antes de decidir el implante hay que seleccionar bien al paciente. Comenzar con el aparato externo por 7 días para corroborar que está respondiendo al tratamiento; para luego colocarle entonces bajo la piel el pequeño aparato que como un marcapasos se le coloca ya en forma definitiva y que encargará de la estimulación
¿Lleva tiempo la cirugía?
Es una cirugía simple, la hacemos mediante una pequeña laminectomía.
¿Se les hace controles periódicos?
A los diez días lo vemos nosotros y los técnicos de la empresa que proveen los estimuladores, que son los encargados de modular y van probando los diferentes polos de los electrodos implantados.
¿Cuáles son las enfermedades que ameritan ser tratadas de esta manera?
El dolor neuropático crónico de distintas causas, dolores de pacientes operados de columna, sobre todo. Y en aquellos dolores neuropáticos en pacientes que han agotado todas las diferentes alternativas de la analgesia.
Los más habituales son los dolores provocados por la columna pero también hemos vistos pacientes con neuralgia post herpética, como las producidas por el herpes zoster, un virus que causa mucho dolor, y que ha evidenciado buena respuesta a la estimulación modular. Son dolores de los nervios y todos los nervios terminan en la columna porque la médula es como un cable que conduce a todas las sensaciones”.