“Si ganaba jugando mal, no me iba contento a mi casa”. Esta frase pinta de cuerpo entero el sentimiento por el fútbol del Negro José Manuel Ramos Delgado, un defensor que marcó toda una época en River y que supo defender la camiseta argentina en los mundiales de Suecia 1958 y Chile 1962, y que falleció este viernes por la mañana a los 75 años.

Ramos Delgado nació en Quilmes en 1935, y debutó en la primera de Lanús en 1956. Tres años después pasó a River, donde compartió plantel con el gran Ángel Labruna.

Pero el reconocimiento mundial del Negro llegaría a partir de 1968, cuando se sumó a un equipo que entraría definitivamente en lo más glorioso del fútbol mundial: el Santos de Pelé.

Con ese elenco de estrellas, fue ídolo en Vila Belmiro y consiguió el campeonato Paulista de 1967, 1968, 1969 y 1973; el Torneo Roberto Gomes Pedrosa 1968; la vieja Recopa Sudamericana 1968, y la Copa de las Naciones 1964 con la selección argentina. Entabló gran amistad con Pelé, que es padrino de una de sus tres hijas.

Luego de su retiro, fue técnico en Platense, All Boys, Estudiantes, River, y algunos equipos del ascenso. Logró el título de periodista deportivo en 1994 y ejerció en varios medios.

Murió este viernes por la mañana en una clínica de Villa Elisa, cerca de La Plata.