Municipio y Concejo le buscan la vuelta a los cuidacoches

El secretario de Gobierno aseguró que este fin de semana controlarán que no cobren tarifa y que no laven autos. Su segundo, Claudio Díaz, consideró la posibilidad de organizarlos con fines sociales. Ayer la intendenta descartó formalizar la actividad mientras que en el Palacio Vasallo se debate desde su prohibición hasta la realización de un registro que los regule

Asegurado confirmó que este fin de semana se focalizarán acciones de prevención y control sobre los sectores de estacionamiento medido, donde no se puede desarrollar esta actividad. “Hay que entender que no hay tarifa para el espacio público, lo que se desarrolla debe ser a voluntad”, subrayó.

El secretario garantizó que se señalizará con cartelería los sitios donde el estacionamiento es libre y gratuito. También se recordará a la población los teléfonos para comunicarse en caso de tener que denunciar alguna conducta indebida de parte de algún cuidacoches. Otro eje de trabajo será el lavado de vehículos en la calle. Al respecto adelantó que se confiscarán los tarros y baldes utilizados para tal fin y se inspeccionarán con mayor énfasis los lavaderos para detectar aquellos locales informales.

Por su parte, consultado sobre el tema, Díaz observó: “Hay que afrontar muchas situaciones de violencia, de exigencias y de daños a vehículos”, dijo y advirtió: “También hay muchos que cuidan autos y ganan su dinero pero sin prepotencia pero –remarcó–el problema existe y hay que tomar este tema entre el Ejecutivo y el Concejo”.

Para el subsecretario, una opción viable es copiar las experiencias de La Florida y de las Colectividades. “En ambos casos, los cuidacoches son instruidos en el buen trato y lo recaudado es para ellos y para el Hospital Alberdi”, ejemplificó. “Por este sendero tenemos que transitar”, indicó.

Alternativas para los “trapitos”

La actividad de los cuidacoches y su presencia en las calles es un asunto de debate en el Palacio Vasallo. Allí, surgieron algunas opciones, desde la prohibición de los mismos de parte del edil Roy López Molina hasta la realización de un registro que los ordene y regule.

Desde el PRO, López Molina, insistió con el proyecto para restringir la actividad. "Si de verdad queremos defender al vecino que se siente amenazado por bandas organizadas de cuidacoches, debemos prohibir su presencia en el espacio publico", manifestó.

En tanto, el concejal de la Unión Cívica Radical, Sebastián Chale, presentó una propuesta de “realizar un censo” para conocer cuál es el origen y los propósitos de cada una de las personas que desarrollan esta tarea en las calles de la ciudad. Pidió prohibir la actividad cuando hay aprietes y extorsión.

Por su parte, Jorge Boasso expresó: “La calle es de dominio público, por eso la actividad del cuidacoches no es ilegal y no se los puede prohibir, pero sí hay que perseguir la extorsión y los abusos en beneficio de los ciudadanos que tienen derecho a estacionar sus vehículos". En este sentido, propuso identificarlos con una credencial y una casaca y, paralelamente, crear la figura del cuidacoches solidario para zonas destinadas a entidades de bien público con fines benéficos.