Este sábado de semana santa los aficionados a la astronomía podrán disfrutar de la “luna azul”, un fenómeno que no se repetirá hasta el año 2020.
Si bien su denominación y su condición de atípica despierten un interés que excede a los especialistas, lo cierto es que el satélite no tiene ningún color diferente, ni su luz varía a la habitual. Ese nombre se le da a la segunda luna llena que puede verse un mismo mes.
Ese fenómeno se produce, en promedio, una vez cada 2,7 años porque a la luna le toma 29,5 días poder dar la vuelta a la tierra, pero el mes calendario tiene 30 ó 31 días excepto febrero.
De hecho, la próxima Luna azul se dará en octubre de 2020.
Solo alrededor de siete veces cada siglo se pueden ver dos lunas azules en un mismo año. La primera suele producirse en el mes de enero y la segunda, en marzo o abril. Este 2018 se produjo lo segundo pero no se dio la del verano.