El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, brindó este martes un fuerte discurso autocrítico en la apertura del año judicial, donde pidió una reforma para adecuarse a las demandas sociales reales y concretas.
Frente a jueces y abogados, el rafaelino afirmó que "mientras la gente pide más seguridad, nosotros seguimos con las discusiones y no brindamos soluciones".
"¿No es posible que nos pongamos de acuerdo en un sistema razonable que respete las garantías constitucionales y al mismo tiempo logre resultados efectivos y que nuestra gente viva más tranquila?", se preguntó Lorenzetti.
Señaló además si bien los temas de violencia género hace muchos años que ocupan un lugar en la Corte, todavía hoy "no se han logrado resultados efectivos" en cuanto a la defensa de la mujer, señala Télam.
"Necesitamos un sistema que defienda las garantías y que permita luchar contra la impunidad", enfatizó. Entre esas reformas necesarias, puso de relieve que la Argentina aún no cuenta con una ley del arrepentido.
Lorenzetti planteó además la necesidad de agilizar el servicio de justicia. Dijo que no puede ser que existan resistencias a que se extienda el horario de atención en tribunales y convocó a los sindicatos a participar de la discusión para facilitar el trabajo de los abogados.
"Tenemos que tener una actitud más abierta. Si hay que cambiar las costumbres, los horarios, ¡hagámoslo!, ¿cuál es al problema? No puede generar tanta discusión. Tenemos que pensar en estar más cerca de la gente. Hay que tomar decisiones y cambiar. Si las instituciones no cambian, los ciudadanos cambian", resumió.