El gobernador Miguel Lifschitz habló del relanzamiento del Frente Progresista que tras los resultados electorales del año pasado decidió “sumar miradas”. Insistió en que “hay que construir síntesis” y “no tachar a nadie”. Habló de la reforma constitucional y de la escalada de violencia en la región de los últimos días.
“Nuestra preocupación no es Cambiemos, sino un proyecto de futuro para Santa Fe. Si no, nos volvemos a meter en la grieta e hicimos un gran esfuerzo para salir de ahí”, observó el mandatario en contacto con los periodistas Ciro Seisas y Evelin Machain del programa A Diario (Radio 2).
Consultado sobre las alianzas que se comenzarán a tejer de cara a las elecciones de 2019, Lifschitz aseguró que todavía es prematuro hablar de ellas y se refirió a la renovación del Frente: “Es tiempo de diálogo, de amplitud”. Respecto de la posibilidad de sumar dirigentes peronistas, sostuvo que “no hay que tachar a nadie ni por sí ni por no”.
“La Argentina está cansada de blanco y negro, hay que construir síntesis”, destacó.
Sobre la reforma de la Constitución provincial dijo que “hay que hacer el esfuerzo para que las cosas pasen”. Con todo, advirtió que las tratativas todavía están “verdes”.
Finalmente, reconoció que los últimos hechos de violencia en la región, particularmente en Rosario, encendieron una alerta en la Casa Gris y apuraron varias reuniones con los equipos de trabajo esta semana.