Del año pasado, los concejales tienen pendientes tratar el pedido de endeudamiento que el oficialismo intentó aprobar en las sesiones extraordinarias de diciembre; pero ahora también deberán –y pronto– discutir qué pasará con las 500 licencias de taxis que se vencen en marzo. La presidenta del cuerpo, la edila radical Daniela León, había propuesto que las chapas que se vencen no caduquen, sino asimilarlas al régimen de las 3.000 chapas originales que son a perpetuidad. En tanto su par peronista, Osvaldo Miatello, se inclinó por "respetar las reglas de juego" y llamar a concurso público. A mediados de mes, los ediles tienen que volver a sentarse en sus bancas.

En total son 500 las licencias que se vencen este marzo y desde el Palacio de los Leones no informaron al Concejo aún si se abrirá un nuevo llamado a licitación. Son al menos 1.500 fuentes laborales las que están en juego si se cuentan tres choferes que trabajen de lunes a lunes en turnos de 8 horas.

“El problema –explicó Miatello, consultado por Rosario3.com– es que si no se resuelve esto rápido son más de mil los trabajadores que quedan en una zona gris”.

En agosto del año pasado, señaló, ya hubo un pedido de informe al Ejecutivo sobre el futuro de estas chapas, aunque sin respuestas.

Por su parte, la concejala León había presentado un proyecto para que estas 500 chapas que se vencen ahora –más las 360 que caducan en 2023– se adjudiquen a sus actuales titulares a perpetuidad, como las 3.000 licencias originales que se repartieron en la década del '80. Éstas son incluso heredables, como un inmueble. 

Sin embargo, para Miatello esa no sería la solución. “Acá se hizo una licitación y las reglas de juego eran por diez años”, observó el edil. Con todo, remarcó que lo importante es “que se preserven las fuentes de trabajo y la calidad del servicio”.

En tal sentido, evaluó como opción prorrogar las chapas hasta el nuevo llamado de licitación.