Después de una noche detenido, Rodrigo Eguillor, el hijo de la fiscal acusado de abuso sexual recuperó la libertad. Dijo que en la comisaría lo trataron muy bien y acusó a la prensa de haber montado “un circo”.
“El alcalde, un fenómeno. PSA, muy mal”, resumió Eguillor su noche de encierro y su detención en Ezeiza por parte de la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Lo capturaron tras dar algunas notas en vivo, antes de subirse a un avión rumbo a España. Las cámaras captaron todo el momento, incluso cuando pidió por su mamá, la fiscal de Lomas de Zamora, Paula Martínez Castro.
Ahora, libre otra vez, acusó a la prensa de haber montado un “circo” con el caso y exigió que “cese el hostigamiento”. Además, pidió disculpas “si alguno se ofendió” con sus videos en Instagram donde se burla, entre otras cosas, de los movimientos de mujeres.
“Me trataron de primera (en la comisaría), ustedes (los periodistas) armaron un circo”, aseguró a la salida de la seccional.
Rodrigo Eguillor, que estudia Derecho y trabaja en los tribunales de Lomas de Zamora, fue acusado de haber violado a una joven en un departamento del barrio porteño de San Telmo. Ella intentó escapar por el balcón y hubo un forcejeo. Él dijo que ella había intentado suicidarse y que él la salvó.
Este hecho fue un disparador. Eguillor tiene otras dos causas judiciales por los delitos de abuso y grooming, y escraches permanentes en las redes sociales de jóvenes que lo acusan de violento y acosador.