Una nena de 11 años que quedó embarazada tras ser violada, fue sometida a una cesárea en la noche de este martes. Ocurrió en Tucumán. La niña había solicitado el aborto ante una psicóloga.
El hecho generó repudio porque se dilató la intervención y porque no se aplicó la modificación del Código Penal, vigente desde 1921, que establece la no punibilidad en este tipo de casos.
Según informó La Gaceta, A.T. está internada desde el 31 de enero en el hospital Eva Perón de Tucumán. Antes había ingresado a un centro de salud por un "dolor de panza". Tras las demoras judiciales se confirmó que este martes se iba a practicar el aborto, sin embargo, Mariana Carbajal, la periodista de Página 12 que siguió la causa, señaló que le hicieron una cesárea.
La petición que había hecho la víctima y su mamá pasó por los Tribunales, que no es necesario en esos casos, ya que el caso "FAL" de la Corte Suprema de 2012 obliga a los Estados provinciales a realizar el procedimiento sin necesidad de judicializar la situación.
El caso generó gran conmoción en la provincia, ya que la nena además intentó quitarse la vida. Según publicó Página 12, en Cámara Gesell manifestó la voluntad de no seguir con el embarazo y comentó: "Quiero que me saquen esto que me puso adentro el viejo".
El violador tiene 65 años. Se trata de Eliseo Víctor Amaya, novio de la abuela de la víctima. Quedó detenido y es investigado por la fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual.
“El caso es bisagra porque evidencia el accionar articulado desde lo institucional para obstruir el acceso a la salud de la niña”, denunció la abogada de Católicas por el Derecho a Decidir y Mujeres X Mujeres, Soledad Deza.
El Código Penal establece desde 1921 que las víctimas de violación tienen derecho a acceder a una interrupción voluntaria del embarazo.