Por Realidad Extendida (RE) se entiende toda combinación entre entornos reales y virtuales, y cada vez cuenta con más usos, que van desde lo lúdico hasta lo social, pasando por supuesto, por lo educativo.
La instrumentación de la RE en ámbitos educativos ofrece algunas de las siguientes ventajas pedagógicas, según consignó Aula Planeta:
- Permite a los estudiantes tener acceso directo a fuentes de información muy alejadas en el espacio o, incluso en el tiempo. De este modo, y sin alcanzar la autenticidad de la experiencia físicamente real, pueden visitarse museos y lugares remotos, así como acceder a reconstrucciones de momentos históricos pasados.
- El grado de inmersión sensorial, y la adhesión emocional que ésta provoca en los usuarios de algunas de estas realidades reconstruidas permite motivar al alumnado, situándolo en situaciones de cierto riesgo o moralmente controvertidas, sin que por ello exista ningún peligro ni tampoco ninguna consecuencia real por una decisión mal tomada en ese entorno creado artificialmente.
Por otro lado, también permite dinamizar una serie de cuestiones transversales a las materias que tienen que ver con el desarrollo y la promoción de competencias:
- Alfabetización digital o multimedia crítica: probablemente esta sea una de las competencias educativas más importantes no ya de cara al futuro, si no para el presente en el que ya vivimos. En un entorno de RE, los alumnos podrán manejarse de forma más o menos autónoma en un mundo en el que la realidad mixta será, en sus elementos virtuales, proclive a un grado de mediatización sin parangón.
- Educación en valores: la RE hace necesaria una educación en valores que sepa educar y formar en un aspecto tan fundamental como pueda ser el respeto hacia los demás tanto dentro como fuera de entornos virtuales, y en la diferenciación de responsabilidades y consecuencias de los actos que se dan en la zona de la RE creada artificialmente, respecto a su área de realidad física.