Una comerciante rosarina vivió una terrible secuencia delictiva este viernes por la mañana, cuando dos personas en moto la persiguieron a contramano en la zona oeste de la ciudad y tiraron al menos diez balazos que impactaron en la chapa y en los vidrios de su camioneta. Uno de los delincuentes se metió por la ventanilla y robó una mochila que contenía 183 mil pesos en efectivo, tres cheques por 25 mil pesos, tarjetas y documentación personal.
Liliana, la víctima del terrible hecho, dio detalles de lo sucedido a Rosario3.com. “Yo tengo mi negocio en Catamarca y Rodríguez, y una vez por semana voy a fábrica a llevar dinero, cheques de clientes y a hacer los pedidos”, detalló.
Este viernes por la mañana, Liliana salió de su negocio en el macrocentro, que se trata de un showroom de una conocida marca de hornos, rumbo a la fábrica de esos productos, que se encuentra en avenida Pellegrini al 6200, en la zona oeste de la ciudad. “Como siempre hago, puse la mochila debajo de mi asiento y salí”, detalló.
Al llegar a Pellegrini y Campbell, la mujer se ubicó para girar, para luego tomar por Barra. En ese momento, dos hombres a bordo de una moto se le ponen a la par. “Se me pusieron muy cerca y yo pensé que los estaba molestando para doblar, por eso les hice seña de que me disculparan. Pero uno me mostró un arma”, precisó Liliana.
“En ese momento me desesperé, no sabía que hacer. Seguí y agarré a contramano por Barra y rogaba que el portón de la fábrica estuviera abierto, pero estaba cerrado. Pero lo más terrible fue que en todo ese trayecto me iban tirando tiros”, confió la víctima.
Liliana contó que los delincuentes siguieron disparando contra la camioneta. Cuando se detuvo, el hombre que iba en la parte de atrás de la motocicleta “metió medio cuerpo” adentro del vehículo y extrajo la mochila que estaba debajo del asiento del conductor. “Yo no me explico cómo hicieron para saber que el bolso estaba ahí, porque desde afuera no se ve nada”, señaló Liliana.
“Me prendí a la bocina, pero es un portón eléctrico que abre muy despacio”, continuó la víctima. Y luego comentó que “adentro de la chata quedaron no menos de cinco vainas, mi camioneta tiene agujeros en los vidrios y en la puerta de atrás”.
En total le robaron 180 mil pesos que llevaba para rendir cuentas en la fábrica, otros 3 mil pesos que llevaba en su billetera, cheques por unos 25 mil pesos, tarjetas de crédito y débito, y documentación personal.
“La verdad que estoy viva de milagro”, confesó Liliana. “Lo primero que pensé es en cerrar el negocio, dejar todo, pero este es un negocio que ya lleva dos generaciones y tengo que seguir”, aseguró.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó que intervino personal de la PDI. Se solicitaron cámaras de la zona y testimonios. Interviene la fiscal Cecilia Brindisi de la Unidad de Investigación y Juicio en turno de flagrancia.