El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se verá con el papa Francisco en el Vaticano en su primera gira al exterior a finales de mayo, que iniciará en Arabia Saudí para crear una nueva alianza antiterrorista con sus "aliados musulmanes" e incluirá también Israel y las cumbres de la OTAN y el G7.
Confirmada ya desde hace un tiempo la asistencia de Trump a la cumbre de la OTAN del 25 de mayo en Bruselas y a la del G7 del día siguiente en Sicilia (Italia), la Casa Blanca anunció este jueves que la gira, la primera del magnate desde que asumió la Presidencia en enero, empezará en Arabia Saudí y continuará por Israel y Roma.
Trump romperá así la tradición de sus predecesores más inmediatos de elegir un país vecino, México o Canadá, como destino de su debut internacional.
"La tolerancia es la piedra angular de la paz", enfatizó Trump este jueves en una ceremonia en la Casa Blanca antes de firmar una orden sobre libertad religiosa y de anunciar los países que visitará en esa primera gira.
En Arabia Saudí tendrá lugar "una reunión verdaderamente histórica" donde "comenzaremos a construir una nueva base de cooperación y apoyo con nuestros aliados musulmanes para combatir el extremismo, el terrorismo y la violencia", anticipó el mandatario.
"Nuestra tarea no es dictar a otros cómo vivir, sino construir una coalición de amigos y socios que comparten la meta de combatir el terrorismo y llevar seguridad, oportunidad y estabilidad a un Oriente Medio devastado por la guerra", argumentó Trump.
En esa misma línea, el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, ya dijo el miércoles que, cuando sea necesario, el Gobierno de Trump separará sus políticas internacionales de la defensa de valores como el respeto a los derechos humanos y no condicionará sus relaciones a la exigencia de que se observen esas libertades.
Al definir de "catástrofe" la situación actual en Oriente Medio, un alto funcionario explicó bajo anonimato en una conferencia telefónica con periodistas que Trump quiere obtener "resultados" de esta gira en los esfuerzos contra el extremismo, por un lado, y en la estrategia para contener a Irán, por otro.
Mientras, otro alto funcionario señaló que Trump quiere demostrar con este viaje que su doctrina de poner siempre a "Estados Unidos primero" es totalmente compatible con un liderazgo global y, además, terminar con la "desvinculación" de los problemas mundiales mostrada por el Gobierno del ex presidente Barack Obama.
Trump ha sido criticado por su acercamiento a mandatarios como el egipcio Abdelfatah al Sisi o el turco Recep Tayyip Erdogan, y más recientemente por invitar a la Casa Blanca al presidente filipino, Rodrigo Duterte, y afirmar que estaría dispuesto a reunirse con el líder norcoreano, Kim Jong-un, "bajo las circunstancias adecuadas".
Visita a los aliados
De Arabia Saudí el presidente estadounidense se desplazará a Israel, donde prevé reunirse tanto con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, como con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, de acuerdo con la Casa Blanca.
Precisamente este miércoles, tras recibir a Abás en la Casa Blanca, Trump se mostró optimista sobre las posibilidades de lograr la paz entre israelíes y palestinos porque ve voluntad en ambas partes y se ofreció a ejercer de "mediador", pero no entró en detalles sobre las condiciones que él cree que deben darse para llegar a un acuerdo.
En febrero, Trump recibió a Netanyahu en el Despacho Oval y entonces se desmarcó de la política de sus tres predecesores al poner en duda que la paz deba incluir la creación de un Estado palestino, mediante la llamada "solución de dos Estados".
Sin precisar tampoco cómo planea el Gobierno relanzar las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos, uno de los altos funcionarios insistió hoy en que Trump siente que, como presidente de EE.UU., tiene al menos que "intentar" ayudar para que sea posible un acuerdo.
En cuanto a su visita al Vaticano, Trump dijo en abril que tenía "muchas ganas" de reunirse con el papa Francisco, después de que la Casa Blanca anunciara que iba a tratar de programar un encuentro del mandatario con el pontífice.
La Santa Sede confirmó hoy que el papa recibirá a Trump en el Vaticano el 24 de mayo.