La Cámara Federal de Casación de la Nación revocó una resolución que enviaba al fuero provincial la investigación de un secuestro extorsivo por el cual fue procesado Ariel "Guille" Cantero.
En la causa, el integrante de la banda de Los Monos fue acusado de haber organizado el secuestro desde la cárcel. Con la nueva resolución de los camaristas Diego Barroetaveña, Daniel Antonio Petrone y Ana María Figueroa, el tema volverá a la Justicia Federal.
La medida de Casación revocó un fallo anterior de la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario, que había ordenado que el delito volviera a ser investigado por la Justicia provincial.
Ahora la Cámara de Apelaciones deberá resolver si deja firme el procesamiento contra el líder de Los Monos por el hecho ocurrido el 9 de septiembre del año pasado.
Ese día un joven fue secuestrado en barrio Triángulo. Según detalló el sitio oficial del Ministerio Público Fiscal cerca de las 19.30, el hijo de un carnicero fue interceptado, equivocadamente, por dos personas, en el cruce de Seguí y Espinillo.
A punta de pistola fue obligado a subir a un vehículo, donde le cubrieron los ojos, tras lo cual lo trasladaron a un galpón.
Una vez allí, y al advertir que la víctima no era la persona que debían secuestrar, sino el hijo de un carnicero, uno de sus captores, de nombre Ezequiel David “Parásito” Fernández –asesinado este año en Granadero Baigorria–, llamó a Ariel Cantero, a quien le comunicó lo ocurrido y le solicitó instrucciones sobre lo qué debía hacer a continuación.
Cantero se encontraba detenido en el marco de las investigaciones que se le siguen como líder e integrante de la banda Los Monos. Sin embargo, según la investigación, se estableció que fue él quien planificó y dirigió el secuestro extorsivo en cuestión, a punto tal que fue quien facilitó las fotografías de la persona que debía ser secuestrada, como así también, dirigió el hecho durante su comisión hasta que finalmente decidió la liberación del joven sustraído erróneamente.
El juez Carlos Vera Barros, determinó en el procesamiento que aunque no llegaron a exigir un rescate por la liberación, esa fue la intención que mantuvieron hasta el final, por lo que procesó a Cantero por ordenar el secuestro.