"En cierta ocasión caminaba por la calle desde el hotel The Mercer, en Nueva York –normalmente no voy a pie a ningún sitio– y una paparazzi que me seguía se cayó en una boca de incendios y se clavó los dientes en el labio. Me incliné hacia ella para preguntarle si se encontraba bien, y ella siguió fotografiándome". Kate continuó el relato: “Yo le dije entonces ¿Sabes qué? Estás mal de la cabeza y ella se sorprendió de que yo me hubiera parado, como si fuera a dejarla ahí, sangrando”.
En la entrevista a la revista inglesa que retoma el sitio 20minutos.es, Kate Moss no dice nada acerca de la relación que mantiene desde 2005 con su novio, el rockero Pete Doherty, ni de las acusaciones de consumo de cocaína que amenazaron su carrera a finales del mismo año.