La joven detenida por intoxicar con alcohol y drogas a su beba e intentar venderla en la vía pública fue imputada este lunes por intento de homicidio, ya que además del riesgo que le generó a su hija, le habría reconocido a una testigo que pensaba en matarla si no encontraba con quién dejarla. También adujo que actuó drogada, abrumada por diferentes problemas personales, y dijo estar nuevamente embarazada.
Luego de la audiencia, la fiscal Gisela Paolicelli, que investiga lo ocurrido el último sábado en Provincias Unidas y Mendoza, dijo a la prensa que Georgina M. O., de 19 años, enumeró diferentes situaciones que la llevaron a proceder de esa manera pero que en su testimonio aseguró no recordar lo que hizo porque estaba bajo los efectos de diferentes sustancias.
“Declaró que está embarazada, que le echaron de donde vivía y que tiene problemas con su pareja y con su hermano. Y que en ese estado de desesperación, tomó vino y pastillas ella, pero en relación a la beba no se acuerda de nada”, describió la fiscal.
Por ese motivo, la defensa de la joven detenida apunta a que se considere su estado mental y de adicciones, aunque según Paolicelli, la acusada “reconoció que le suministró a su hija vino espumante y pastillas que serían de clonazepam” cuando, el sábado, se le acercó una mujer a la que también le habría admitido que quería “regalar o vender” a su pequeña de 1 año y 3 meses de edad.
“Ella le reconoce a esta mujer que si no la podía dar, la iba a matar”, señaló la encargada de la investigación, y agregó que esta testigo “vio cuando le dio una pastilla a la bebé, por lo que la tomó, la hizo vomitar y avisó a la policía”.
La fiscal concluyó que este hecho “podía haber llevado a la muerte a la nena si no interfería una vecina” y por eso la imputación de “tentativa de homicidio agravada por el vínculo”, al tratarse de la madre de la víctima.
Evolución favorable
En otro orden, Paolicelli relató que la beba, sometida a un lavaje de estómago y diversos estudios, ya está “en buen estado de salud” y restan hacerle algunos análisis “para descartar secuela posteriores”.
Permanece internada en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde la atiende un equipo mutidisciplinario junto a personal de la Dirección de Niñez.
Los primeros estudios arrojaron que en su organismo se hallaron restos de una droga que “muy probable sea clonazepam y también de líquido “que al parecer es el vino que mencionó la madre”.