A pesar de que en la Biblia no aparece ninguna descripción de cómo era Jesús, desde siempre se lo ha representado con pelo largo, barba y túnica. Ahora, el investigador e historiador Ralph Ellis afirma tener en su poder la única representación real de la imagen de Cristo.
La imagen fue descubierta en una moneda de bronce que data del siglo I, que en un principio se creía que pertenecía al rostro de del rey Manu, que gobernó el reino mesopotámico de Edesa, en el sudeste de la actual Turquía. Pero según el historiador Manu y Jesús serían la misma persona y considera que su descubrimiento podría ser uno de lo más importantes de la historia moderna, según informó el periódico Mirror.
"Hice de mi trabajo de toda la vida una conexión entre las personas de la Biblia con la historia y Jesús; tal vez el hombre más importante en la historia occidental, merece ser llevado de la oscuridad de las sombras bíblicas a la luz de la historia. La moneda es la cereza del postre y al menos sirve para construir una verdadera identidad", concluyó Ellis.