El gobierno provincial pondrá en marcha exámenes para detectar si funcionarios y policías consumen estupefacientes. En diciembre del año pasado se definió un pre acuerdo con la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y en febrero avanzaron las gestiones. Los análisis serán de orina. En caso de que un policía obtenga un resultado positivo, el Ministerio de Seguridad le retirará el arma como primera medida y luego iniciará un proceso para establecer si sigue o no en la fuerza. Si integra la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones será apartado.
Fue el ministro de Gobierno de Córdoba, Carlos Massei, quien deslizó en el programa A Diario (Radio 2) que en Santa Fe se iba a tomar la medida. Lo hizo luego de explicar que se implementará la iniciativa en su provincia con los agentes policiales. "Trabajamos junto a (Maximiliano) Pullaro", señaló.
Según el periodista Hernán Funes, en febrero de este año avanzaron aún más las gestiones con la UNR al punto que sólo resta la firma del convenio y establecer el protocolo del procedimiento que contará con varias medidas de seguridad.
Desde el Ministerio de Seguridad indicaron a Rosario3.com que la decisión –que se había mantenido en reserva hasta las declaraciones de Massei– será anunciada entre esta semana y la próxima. Agregaron que el compromiso se hizo con la cátedra de Farmacología de la facultad de Medicina de la UNR.
El test presenta dos pasos. El policía o funcionario deberá pasar a un cuarto donde deberá orinar en dos recipientes. En uno se analizará si consume droga y qué tipo. En otro, a través de un espectómetro con detector de masa, se especificará qué cantidad de droga tiene en el organismo. Después, la persona será entrevistada.
El primero en realizarse el examen será el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, y lo seguirán sus funcionarios. Después lo harán los policías que integran la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones (DGPCA), y luego el resto de la fuerza, que tiene unos 22 mil agentes. Los tests se llevarán a cabo por sorteo.
La cartera de Pullaro definió que a los agentes que den positivo el examen se les sacará, como primera medida, el arma reglamentaria. Luego se iniciará un proceso donde se decidirá si continúan o no en la fuerza. En caso de que haya efectivos policiales de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones que den positivo el examen serán apartados.
El secretario de Control de Fuerzas de Seguridad, David Reniero, había advertido el año pasado que estudiaban la puesta en marcha de la medida. La declaración fue hecha tres días después de que un agente del comando radioeléctrico fuera detenido con bochas de cocaína en su poder.