El inglés Lewis Hamilton (Mercedes) celebró este domingo su segunda victoria de la temporada en la Fórmula Uno, al coronarse en el Gran Premio de España que se corrió en el autódromo catalán de Montmeló, donde el alemán Sebastian Vettel (Ferrari) y el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) completaron el podio.

El británico, que había ganado la segunda fecha en Shanghai (China), se impuso gracias a una acertada estrategia de su escudería, que le permitió llegar con menor desgaste de sus neumáticos al tramo final de la prueba en Barcelona, presenciada por 94.623 personas.

Tras largar desde la pole position, Hamilton perdió la punta en la salida con Vettel pero pudo recuperarla en la vuelta 43 después de que su compañero de equipo, el finlandés Valtteri Bottas, erosionara al adversario de Ferrari en la lucha por la vanguardia.

Pese al segundo puesto, Vettel mantuvo el liderazgo de la temporada con 104 unidades pero Hamilton se le acercó a seis y Bottas, que hoy abandonó en la vuelta 38 por un problema en su motor, quedó tercero con 63.

El inglés completó los 66 giros al circuito de Montmeló en 1:35:56.497. Aventajó por 3,490 segundos al alemán, por más de un minuto a Ricciardo y al resto le sacó una vuelta o más de diferencia.

Dentro de la zona de puntos llegaron el mexicano Sergio Pérez y el francés Esteban Ocon, ambos de Force India; el alemán Nico Hulkenberg (Renault); el español Carlos Sainz (Toro Rosso), el alemán Pascal Wehrlein (Sauber); el ruso Daniil Kvyat (Toro Rosso) y el francés Romain Grosjean (Haas).

El astuariano Fernando Alonso (McLaren) pudo completar su primera carrera del año, al cruzar duodécimo tras partir de la séptima posición de la grilla inicial. Terminada la carrera, marchó hacia Estados Unidos para participar de las 500 millas de Indianápolis, lo que le impedirá disputar la próxima fecha de F1 en Mónaco por decisión de su escudería.

El holandés Max Verstappen (Red Bull), ganador el año pasado en Barcelona, debió abandonar en la primera vuelta luego de ser embestido por la Ferrari el finlandés Kimi Raikkonen, cuya deserción provocó una enorme angustia de un pequeño fanático tomado por las cámaras en una de las tribunas.

Todavía con la carrera en curso, el finlandés tomó contacto con el niño, lo consoló y le arrancó una gran sonrisa que fue retratada en una foto subida al Twitter oficial de la F1.

El Gran Premio de Mónaco, el domingo 28, será la próxima cita de la categoría reina, sexta de la temporada.

Fuente: Télam