Una empresa local desarrolló un inhibidor de celulares que puede utilizarse en colectivos, a fin de que los choferes no puedan usar sus teléfonos cuando están al volante. La iniciativa fue presentada al titular del Ente de la Movilidad de Rosario, Carlos Comi.
En diálogo con A Diario, el programa de Alberto Lotuf en Radio 2, Federico Oakley, uno de los desarrolladores, confirmó que cuentan con un dispositivo para inhibir la señal de celular en colectivos y camiones: "El rango se restringe a lo que nosotros queremos. Cero metros, uno o cinco", precisó y explicó que en caso del transporte público se puede colocar el aparato debajo del asiento del chofer o bien, en el tablero.
“No tiene radiación, no es dañino para el cuerpo humano, no afecta a ningún otro dispositivo como, por ejemplo, el GPS”, agregó. Esta tecnología suele ser usada en bancos pero “a nivel de movilidad no hay registro en Argentina”, destacó el empresario.
Oakley detalló que el costo del inhibidor es de 645 dólares y defendió el valor: “El seguro no paga si se demuestra que el conductor estaba usando el celular”, apuntó.
Por otra parte, comentó que ya tuvo una reunión con el titular del Ente de la Movilidad de Rosario, Carlos Comi a fin de avanzar en su instalación en los 950 coches de la flota pública, según los registros a los que accedió el empresario. “El 25 o 30 por ciento de los accidentes se realizan por el uso del celular. Si consideramos que hay 13 millones de vehículos en el país y unos 500 mil son colectivos, estamos enfrente de bombas de tiempo que andan dando vuelta”, observó.