El rabino Sergio Bergman, expresó por Radio 2, su alegría por la asunción del sumo pontífice. Saludó “a un amigo del corazón” y dijo que su elección fue una valerosa apuesta de los cardenales, que servirá de guía a todas las religiones.

En diálogo con Alberto Lotuf ( A Diario), el ministro judío felicitó a monseñor Jorge Bergoglio, quien desde ayer se convirtió en Francisco I y cambió sus ropas purpuradas por una hábito blanco y sencillo.

“Es la continuidad de Juan Pablo II, todas las religiones tenemos en él a un maestro”, aseguró Bergman quien lo llamó “rabino”, tratamiento que en el judaísmo se reserva, justamente, para los maestros; en hebreo bíblico, significa “abundante” o “distinguido”.

Para el rabí, la opción del colegio cardenalicio por el arzobispo de Buenos Aires, ordenado jesuita, fue una “valiente” decisión y un “claro mensaje” a la Iglesia, que tiene que ver con que la evangelización no pasa por los cielos, sino por acciones terrenales, concretas.

Finalmente, se refirió a las virtudes de Francisco I y a cómo es tenerlo como amigo. “Los que tenemos el honor de conocerlo sabemos que es un hombre verdadero, un maestro en el ejemplo”, sostuvo. Para el rabino, el compromiso ahora debe ser mayor.