La inseguridad volvió a golpear con fuerza este lunes por la tarde en Rosario y la zona, con dos violentos asaltos contra diferentes automovilistas que llevaban, en ambos casos, mucho dinero. En uno de los hechos hubo una feroz balacera contra el coche y el conductor se salvó gracias a un vidrio blindado.

El episodio más grave se dio en Pueblo Nuevo –acceso a Villa Gobernador Gálvez desde Rosario–, donde en Nogués y el puente del ferrocarril, un proveedor ganadero de un frigorífico que circulaba en un auto BMW fue interceptado por otros dos coches, desde los cuales varios delincuentes efectuaron al menos seis disparos de arma de fuego.

La víctima, de 46 años y domiciliada en Casilda, llevaba entre 400 mil y 450 mil pesos –además de otros valores– en un maletín que le fue sustraído pero no sufrió heridas. Los balazos impactaron en una ventanilla (cuatro de ellos) y en dos ruedas. El vidrio blindado del vehículo salvó al conductor de consecuencias peores.

El hombre, notablemente alterado por el episodio al ser entrevistado por la policía –interviene la comisaría 25ª–, manifestó que lo encerraron una Renault Spidway de color gris, que fue abandonada en el lugar, y otro vehículo no identificado del mismo color. Al móvil de Telenoche (El Tres) le dijo que escuchó "no menos de siete u ocho disparos". Los asaltantes se fugaron con el dinero; eran al menos tres hombres. 

 

Salidera en pleno centro de Rosario

El otro hecho de inseguridad contra un automovilista se produjo, también por la tarde, en el centro de Rosario, donde un médico fue víctima de una salidera luego de retirar dinero de un banco. Le robaron 300 mil pesos en efectivo.

Según informaron fuentes policiales, se trata de un neurocirujano que trabaja en el sanatorio de Pueyrredón y San Luis. Había extraído la plata en el ICBC ubicado en Sarmiento y Pellegrini y se dirigía, al parecer, al centro de salud, ya que fue perseguido y abordado en el ingreso de una cochera en Pueyrredón al 900.

Allí, lo sorprendieron dos delincuentes a bordo de una moto. Uno bajó, rompió el vidrio del lado del acompañante y se llevó la maleta con el jugoso botín. El médico no sufrió lesiones físicas.