Un grupo de madres se concentró este miércoles en las puertas de la superintendencia de salud de Rosario, en Mendoza al 1000, para reclamar que las obras sociales le paguen a los prestadores y así sus hijos puedan volver a tener la cobertura médica y asistencial.
"Mi hijo de cuatro años se quedó hace dos meses sin asistencia domiciliaria, él tiene síndrome de down y tengo que llevarlo todos los días conmigo al trabajo porque Ospecon no pagó y no nos da una respuesta", indicó una madre a El Tres, mientras que otra precisó que "es la segunda vez que nos pasa, sentimos que nuestros chicos son números para ellos, pero son personas".
Una de las mujeres indicó que hace cuatro años está esperando que le entreguen la silla de ruedas que tramitó para su hijo que sale 90 mil pesos. "Le debo todo a un médico que lo operó ad honorem porque escuchó mi caso", dijo, y lamentó que "nos hacen justificar a nosotros en qué gastamos el dinero de las pensiones contributivas cuando los jueces y políticos no hacen eso".
"Necesitamos que alguien nos ayude, todos se lavan las manos, pedimos que las obras sociales se hagan cargo", concluyó.