Activistas, legisladoras y diversos referentes se dieron cita ayer en la Facultad de Medicina para debatir acerca del aborto. La iniciativa, inédita, tuvo lugar en el seno de la Universidad Nacional de Rosario, que abrió ayer su auditorio central "Che Guevara" para alojar a todos los participantes.
La propuesta fue debatir sobre la "Interrupción del embarazo en un contexto de derecho". El decano Ricardo Nidd inauguró la jornada, y además de anfitrión, fue el moderador de la primera mesa, que convocó a la médica de Chubut Stella Maris Manzano, al ex director de Políticas de Género e Interculturalidad del ministerio de Salud, Daniel Teppaz, como así también a la abogada de Cladem, Analía Aucía y a la fundadora de Católicas por el Derecho a Decidir, Marta Alanis.
Según publica hoy Rosario12, el día cerró con una reunión del Consejo Académico Social en Salud, multitudinario, donde se analizaron las propuestas surgidas de los distintos paneles. "Esta es una jornada histórica", dijo Teppaz al comenzar su ponencia, y más tarde recordó que en esa Facultad, durante años, no se enseñó sobre métodos anticonceptivos, debido a las posiciones morales de los docentes titulares de las cátedras.
Por su parte, la diputada Silvia Augsburger participó de la jornada donde resaltó la importancia de que se debatan las estrategias para legalizar el aborto en Argentina. "Es muy importante que desde un ámbito como la Facultad de Medicina podamos dar el debate acerca de las estrategias, iniciativas y fundamentos para legalizar el aborto en Argentina, que para muchas de nostras es la asignatura pendiente que tiene nuestra democracia", expresó la legisladora.
"Hoy el Congreso de la Nación debe decidir cuál es la respuesta que le damos a una mujer que aborta: si lo consideramos delito o derecho, si la vamos a obligar a cumplir con los mandatos sociales o vamos a dejarla decidir, si vamos a seguir fortaleciendo el inmenso negocio de las clínicas privadas o vamos a garantizar el acceso democrático a la salud sexual y reproductiva".
"Hace diez años que presentamos el primer proyecto para la interrupción del embarazo y, si bien no hemos logrado que se debata dentro del ámbito que debe ser tratado, que es el Congreso, el contexto jurídico y social ha cambiado mucho: han habido fallos que han modificado el panorama legal y a nivel social, el tema del aborto ha ganado terreno como problemática que excede lo personal y que debe ser abordada desde la política pública. Las estadísticas lo marcan: en nuestro país se practican cerca de medio millón de abortos al año".
"A pesar de este marco, la ilegalidad en la que se mantiene el aborto favorece situaciones como la que sucedió recientemente en la provincia de Buenos Aires, donde no se permitió que entre en vigencia el nuevo protocolo para la atención de casos de aborto no punible, que vaya en sintonía con el fallo FAL del año 2012 y produce casos como el de Belén, en Tucumán. Los organismos internacionales ya nos han llamado la atención sobre los efectos negativos que tiene la criminalización del aborto y que esto debe cambiarse: vivimos en un país en que las mujeres pierden la vida o la libertad por abortar y esa es la manera que tiene el sistema de disciplinar a aquellas mujeres que deciden enfrentar los mandatos sociales. Desde el Estado cabe la responsabilidad por estas muertes", finalizó Augsburger.