La tendencia actual a la postergación de la maternidad desafía a los especialistas. Hasta hace pocos años atrás, una mujer a los 35 años ya tenía hijos. Hoy en día se posterga la maternidad por razones sociales o profesionales, y cuando esa mujer madura aunque joven, consulta por infertilidad después de los 35 años, ya es más difícil que cuente con óvulos en cantidad y calidad capaces de hacerle alcanzar el embarazo.
Este hábito de mujeres que posponen la maternidad por cuestiones sociales o profesionales, llevó a Rosario3.com a entrevistar a una especialista, la doctora Constanza Nazario, ginecóloga y especialista en Medicina Reproductiva, integrante de Proar Programa de Asistencia Reproductiva Rosario.
Ustedes se enfrentan a lo que se ha dado en llamar “falla ovárica”. ¿De qué se trata, doctora Nazario?
Existen una falla ovárica prematura y una falla ovárica por la edad. Nosotros vemos pacientes con falla ovárica conocida porque esa paciente fue sometida a un tratamiento de fertilidad de alta complejidad y la cantidad de ovocitos que se esperaba obtener no fue suficiente. Esta falla ovárica puede ser de aparición sorpresiva.
El problema con el que hoy nos encontramos, lamentablemente, es el de la consulta tardía. Ya que nos consultan mujeres de aspecto muy joven pero con edades en las que sus ovarios están agotados. Por eso estamos promoviendo la consulta precoz e incluso el congelamiento ovocitario, entre los 25 y 35 años, edad a partir de la cual la pérdida de ovocitos se acelera, para aquellas mujeres que llegan a la consultan y nos manifiestan que no quieren tener hijos todavía por cuestiones laborales, de estudio o sociales. Hasta hace unos años las mujeres planificaban tener hijos a más temprana edad.
¿Cómo se puede anticipar esta falla?
Tenemos estudios mediante los cuales podemos chequear hormonas, algunas de las cuales varían de ciclo a ciclo y otras que no varían pero nos anticipan qué podemos esperar de la paciente.
Nuestra tarea no sólo es concientizar a la población en general sino, también a los ginecólogos para que pidan estos estudios. Ya que, incluso, no son frecuentes tanto la derivación temprana como la consulta temprana.
¿Cómo puede hacer la mujer para prevenir esta situación?
Primero que haga lo más tempranamente posible la consulta con su ginecólogo. Los ginecólogos que nos especializamos en Medicina Reproductiva estamos capacitados y contamos con la tecnología adecuada para ofrecerle a esa mujer guardar sus ovocitos cuando está alrededor de los 25-35 años; se los vitrifica y cuando la mujer vuelve a la consulta con su pareja y está decidida a tener hijos y no lo pueden lograr espontáneamente, se descongelan sus ovocitos y se los utiliza en un tratamiento de alta complejidad.
Ustedes hablan de las “pobres respondedoras”, ¿qué significa?
Hay consenso internacional al respecto. Pensamos que las pobres respondedoras que van a tener una baja respuesta son aquellas pacientes cercanas a los 40 años a las que se les hace estudios de ecografías con las que medimos, cuando menstrúa, la cantidad de folículos que tiene para que pueda responder a la terapia hormonal. Pedimos análisis de sangre para medir hormonas como el estradiol y la antimuleriana que miden la reserva ovocitaria. Estos son los criterios que usamos para aquellas mujeres mayores de treinta años con baja cantidad de folículos.
IX SIMPOSIO PROAR SOBRE MEDICINA REPRODUCTIVA
En pocos días más, Proar organiza, como lo hace cada dos años, un simposio con invitados extranjeros; ¿qué puede anticipar del mismo?
Los días 24 y 25 de Agosto en el Hotel Plaza Real de Rosario, se llevará a cabo el IX Simposio, el que, este año nos hemos centramos en tener relatores locales y dos relatores extranjeros quienes abordarán temas de especial atención para los médicos de la especialidad, como son la genética, la andrología, lo nuevo en estimulación ovárica controlada, cirugía endoscópica; en fin, temas de actualidad para los profesionales interesados en la especialidad.
¿Cuáles son los invitados extranjeros?
Son el Dr. Marcelo Barrionuevo, que es argentino pero trabaja desde hace años en los EEUU y el Dr. Ricardo Loret de Mora que es mejicano pero trabaja también en los EEUU