Eduardo Coudet vivió su primer partido oficial en el Gigante a pleno. Saludó a los hinchas con los puños apretados cuando entró, cambió nombres y estrategias de acuerdo al desarrollo del partido, asistió a Gustavo Alfaro cuando éste recibió una agresión desde la hinchada y se fundió en un abrazo con su asistente Garcé cuando Marco Ruben hizo el tanto del triunfo.
“Lo primero que quiero decir que lo que pasó con Alfaro fue lamentable, tenemos que tener una mejor conducta de locales. Tuvo unos huevos bárbaros para seguir. Fue un hecho que manchó la victoria”, dijo el Chacho de arranque.
“Creo que no jugamos bien, pero lo ganamos a lo Central”, tiró después el conductor canalla.
“La intención era jugar mucho más por abajo, romper la línea defensiva de Tigre y atacar mucho por afuera. Pero ellos tienen oficio y un técnico que trabaja muy bien los partidos”, describió el DT.
El Chacho admitió: “Estoy contento con el triunfo, los tres puntos quedaron en casa que es lo más importante, pero seguramente tenemos muchas cosas para corregir”.
“Tuvimos que cambiar la estrategia varias veces dentro del partido”, reconoció Coudet.
“Esperemos que no todos los triunfos sean así, porque el desgaste físico y anímico fue muy importante”, disparó el Chacho con una sonrisa.
Por último, Coudet le tiró flores a Niell, que terminó siendo decisivo en el partido: “Franco está muy bien, la verdad que lo veo mejor que nunca. Lo necesitamos mucho”, remató.