Con un inhibidor de alarma, un muchacho abrió la camioneta de un hombre que lo había dejado estacionado en el centro rosarino este mediodía y casi termina linchado. Vecinos que pasaban por el lugar se enfrentaron al ladrón pero la víctima se quedó con él hasta que llegó la policía.
“No lo quise largar porque la gente estaba como para lincharlo”, explicó la víctima que, en contacto con el programa De 12 a 14 (El Tres) contó la secuencia. El hombre había dejado estacionada la camioneta en Sarmiento y Urquiza para un trámite rápido y cuando regresó, encontró al muchacho adentro, y con su billetera. El presunto delincuente le dijo que se había equivocado de auto pero el dueño del vehículo lo increpó y logró que le devolviera la billetera.
Llamó luego a la policía pero para entonces ya se había reunido un grupo de gente alrededor del muchacho y comenzaron a escucharse insultos. La víctima agregó que el ladrón alcanzó a hacer algunos llamados: “Agarró el teléfono y decía «Avisá que me agarraron»”.
“Se ve que están acostumbrados”, reflexionó la víctima que ya sufrió con anterioridad el desvalijamiento de su camioneta con el mismo método del inhibidor de alarma.